Chapter Twenty seven.

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El híbrido se encontraba en un estado dónde realmente no sabía qué decir o cómo actuar, jamás había pasado por su cabeza la idea de ver a Jungkook en tal estado, sus ojos no se quitaban de los moretones en su rostro y sus dedos acariciaban una de sus mejillas aprovechando estar sentado al lado de su cuerpo en la cama de su habitación, aún desmayado.

Si bien Seokjin hizo su mayor trabajo para curarlo aún se marcaba todo muy reciente, su mirada fué hacía los chicos restantes que estaban parados y no hacían más que quedarse en silencio y mirarse entre ellos.

— ¿Qué pasó?

Hizo la pregunta que tanto había esperado y sabía que sus amigos lo sabían, pero por alguna razón no querían hablar del tema, él lo sabía, sus sentidos le indicaban, sus orejas se movían cada vez que escuchaba algún ruido y susurro. Para su sorpresa, aún no había llegado a escuchar una palabra clara y eso le comenzaba a estresar.

— Hyung. — llamó al mayor — Todos aquí saben pero nadie quiere decirme ¿Por qué?

— Jimin, no es algo sencillo.

— Quiero saberlo, alguien le hizo daño.

— Pero no es fácil.

— Por favor.. Quiero saberlo, pertenezco a su vida, quiero cuidarlo como él lo hace conmigo, necesito saber que no hay nada malo. Taehyung, eres su mejor amigo, sé que cuento contigo para todo.

El mencionado se mantuvo procesando las palabras de Jimin, miró a los demás quienes estaban con la misma mirada, también pensando en cómo contar todo.

— Empezó hace tiempo atrás, para ser exacto, en ese entonces Jungkook apenas y cumplió los trece años.

— No es necesario, Taehyung, yo lo haré.

Todos observaron a Jungkook quién ya estaba despierto con el rostro más calmado posible, quiso sonreír al verlos preocupados pero al hacerlo sintió un ardor en su labio inferior.

— Jungkook.

— Jimin.

— ¡Jungkook! — exclamó Hoseok.

— Por favor, nada de gritos.

— Manada en silencio. — respondió Taehyung poniendo sus manos y tapando las bocas de Hoseok y Namjoon.

Pero si Namjoon no había dicho ni hola.

Detalles.

— Como Taehyung dijo, en ese entonces había cumplido trece, lo recuerdo como un tatuaje permanente en la mente.

Jungkook había salido del colegio dando brincos junto a Eunwoo, quién era su mejor amigo en ese entonces, los dos estaban pegados como orugitas de un lado para el otro y no se separaban en ningún momento desde las ocho horas que entraban y salían del lugar.

Muy pocas veces sus padres lo recogían, por ello confiaba en que el papá de Eunwoo lo llevaba en su camioneta hasta su casa o venían a recogerlo algún trabajador de su padre.

— Jungkook ¿Tienes algún plan para el sabado?

— Sábado.. No, mis padres tienen una reunión de negocios así que seremos la señora Hyerin y yo en mi hogar ¿Por qué?

Para ser pequeño, a su edad Jungkook sabía expresarse muy bien, sumándole a sus clases en el colegio, también recibía clases avanzadas de inglés y demás cosas en su casa, totalmente privadas.

— Esperaba que podamos salir al parque de siempre ¡Pero está vez es muy importante!

— ¿Hay algún evento?

Lovely ⵌ KookMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora