Mi Salvación (Terminada)

Capítulo 12

Aleix

Estaba mintiendo

Cuando Mia le dijo al director que había ido a la enfermería por un mareo sabía que estaba mintiendo, lo podía notar en su voz, además llevaba varios días sospechando de que algo pasaba ya que me parecía muy raro su comportamiento con mi padre. Desde pequeña Mia siempre ha sido muy unida con él por lo que ver el miedo que le tiene me hace sospechar, además no me creí la excusa que me dijo ese día cuando se encerró en el baño, no tenía sentido que estuviera triste por la muerte de sus padres y que se encerrase en el baño a llorar y que no quisiera salir estando mi padre ahí

Todo eso me parece muy raro, algo pasa entre ellos dos y pienso descubrir que es. Hace unos días puse una cámara en la habitación de Mia para ver si ocurría algo en mi ausencia, se que está mal pero estoy muy preocupado por ella y si mi padre o otra persona le está haciendo daño, me ocupare personalmente de que no le vuelvan a hacer daño

Cuando me despido de Mia me subo al coche y me dirijo a casa, ahora mismo mi padre no se encontraba en casa por lo que aprovecharía para ver el video. Al llegar aparco, bajo de coche, entro dirigiéndome a su habitación, al entrar cierro la puerta, cojo la cámara de donde la había escondido y salgo de la habitación dirigiéndome a la mia

Al llegar entro y cierro la puerta, me acerco al ordenador, lo enciendo, cuando se enciende conecto la cámara, me siento en la silla y empiezo a ver el video

La grabación era de anoche

Lo primero que veo es a Mia sentada en su escritorio, seguramente haciendo los deberes, rato después la puerta se abre y por ella entra mi padre, de pronto la cara de Mia cambia a una de pánico

-¿Qué haces aquí?, ¿Dónde está Aleix?-le pregunta asustada alejándose de él

-Ha salido, por lo que estamos solos

-¿Q-que?

-Estamos solos por lo que ya no podras escaparte

-No, por favor-dice con lágrimas en los ojos alejándose más de él

Entonces lo que veo a continuación me llena de ira, no me esperaba algo así de él, siempre lo había visto como un buen hombre, cariñoso y protector, pero se ha acabado, le voy a hacer pagar por todo el daño que le ha hecho a mi princesa, se va a arrepentir, lo juro por todo mi amor hacia mi princesa

Lo único bueno es que se que Mia no solo me tiene a mí para protegerla, ese chico se nota que la quiere y que la va a proteger de quien sea, confío en él

Cuando termino desconecto la cámara del ordenador y lo apago, entonces escucho la puerta de abajo abrirse, salgo de la habitación bajando las escaleras, al llegar abajo lo veo

-Hola hijo-saluda

-Hola-digo serio

-¿Dónde está Mia?

Frunzo el ceño

¿Para qué quieres saberlo?, ¿para follartela?

-Esta con su novio-digo sabiendo que le molestaría

Frunce el ceño molesto-Ya veo, bueno, espero que ese chico la cuide bien-expresa molesto

-Lo hace, estoy seguro de eso-afirmo

Me mira molesto, no dice nada más y se dirige a la cocina

Aprovecha el tiempo que te queda, porque pronto acabare contigo

Mia

Ya habíamos llegado, se baja de la moto, me agarra de la cintura y me ayuda a bajar de ella, me quita el casco y me sonríe dulcemente, me da un dulce beso, se lo devuelvo deleitándome de su sabor y su dulzura, cuando nos separamos me agarra de la mano y entramos al edificio

Al entrar María nos sonríe al vernos

-Buenas tardes María-saluda Liam

-Buenas tardes hijo, ¿Cómo estás?

-Muy bien ¿y tú?

-Estoy bien-sonríe, me mira- ¿y tú?, ¿Qué tal estas hija?-me sonríe

-Muy bien María, gracias-sonrío

-Me alegro mucho, bueno no os quito más tiempo, que os lo paséis bien

-Gracias María, nos vemos luego-nos despedimos y nos acercamos al ascensor, nos montamos y empezamos a subir

-Snow está deseando verte, no para de preguntarme de ti-menciona con una sonrisa

-¿De verdad?-sonrío-¿Cómo te lo ha podido decir sino sabe hablar?-interrogo burlona

Sonríe presumido-Soy muy inteligente, se comunicarme con él de una forma que nadie más entiende

Río-di más bien que Snow es muy inteligente

Sonríe-Puede, pero yo se lo he enseñado todo

-No lo dudo

Me atrae hacia su pecho rodeándome por la cintura, me sonrojo, lo miro a los ojos, me sonríe y une nuestros labios dulcemente, no va con prisas, es lo que más me gusta de él, intenta hacer que me sienta cómoda y que no tenga miedo, lo quiero tanto, es el mejor chico que he conocido en mi vida sin contar a mi primo

Al llegar al piso adecuado el ascensor se detiene y las puertas se abren. Salimos del ascensor y nos dirigimos a la puerta correspondiente. Cuando llegamos Liam abre la puerta y entramos. Nada más entrar vemos a Snow en la misma posición que estaba la última vez que vine, al vernos mueve la cola feliz y se acerca a mí, sonrío cuando lo tengo delante, me agacho a su altura y acaricio su cabeza suavemente

-Hola Snow, ¿Cómo estás?-digo acariciándolo con cariño

Snow suelta un ladrido respondiéndome, no puedo evitar sonreír, es tan dulce

-¿Qué pasa Snow?, ¿ya no me quieres?-pregunta Liam triste

Snow se acerca a Liam y se le empina ladrándole feliz, Liam sonríe acariciándolo

-¿Estas celoso?-cuestiono burlona

Me sonríe pícaro-no sabes cuánto bonita, aunque la verdad es que lo entiendo, es imposible resistirse a ti-dice acercando su cara a la mia, me sonrojo

-Bobo- susurro nerviosa

Sonríe-y tu preciosa-me besa dulcemente

Se lo devuelvo encantada deleitándome de sus labios

-Te quiero-susurra sobre mis labios

Me sonrojo-Te quiero

-Venga entremos-dice, me agarra de la mano y entramos en el salón

-¿Quieres comer algo?-me pregunta al entrar en el salón

-No hace falta, gracias, no tengo hambre-sonrío

-Está bien, espérame aquí, voy a darle de comer a Snow-asiento, se dirige a la cocina con Snow siguiéndolo

Me siento en el sofá a esperarlo, suspiro relajándome, iba a hacerlo, iba a contarle a alguien lo que tantos años llevo ocultando, no iba a negar que estaba nerviosa, pero confiaba en Liam, sabía que podía confiar plenamente en él

Poco después lo veo aparecer por la puerta, sonríe acercándose a mi y sentándose a mi lado

-¿Estás bien?-cuestiona preocupado

-Sí, solo estoy un poco nerviosa

-Si no estás preparada no pasa nada, puedo esperar-dice agarrándome de la mano

-No no, lo estoy, te prometí que te lo diría y lo haré

Asiente, me aprieta la mano dándome ánimos

Allá vamos