Mi Salvación (Terminada)

Extra 1

Mia

Dos años después.

Me encontraba muy nerviosa mientras esperaba el resultado dando vueltas por la habitación.

Hacia una semana que tenia un retraso y recordaba haberlo hecho con Liam hace unas pocas semanas por lo que al notar el retraso empecé a pensar en la idea de que podría estar embrazada.

Por eso ahora mismo me encontraba en la habitación muy nerviosa mientras esperaba el resultado del test.

No podía evitar esta nerviosa, aun era bastante joven, solo tenía 20 años, pero no podía negar que me hacia ilusión el tema de ser madre.

Yo siempre había deseado ser madre y cuando pase por todo eso llegue a pensar que nunca podría llegar a tener hijos. Solo esperaba que ese pensamiento no se hiciera realidad.

Cuando ya han pasado los minutos necesarios entro al baño. Suspiro acercándome al lavabo y cogiendo la prueba. Abro los ojos poco a poco hasta que miro el resultado.

Positivo.

Estaba embarazada…

No sabia que pensar. Tenia un montón de emociones en mi interior. En lo único que podía pensar era en que…

¿Cómo se lo iba a decir a Liam?

No tenía ni idea de como reaccionara, solo esperaba que se lo tomara bien.

Rato después.

Estaba colocando los platos sobre la mesa cuando escucho la puerta abrirse, me vuelven a entrar los nervios, Snow me mira dándome ánimos.

—¡Princesa! ¿Dónde estas?— dice mientras lo escucho acercarse a la cocina. Cuando entra sonríe al verme.— Aquí estas— se me acerca. Me abraza con fuerza, esconde la cabeza en mi cuello aspirando mi aroma. Le devuelvo el abrazo. Me mira con una gran sonrisa—¿Estas bien princesa? Te noto rara.

Sonrío un poco nerviosa— Estoy bien, solo es que te echaba de menos.

Sonríe— Y yo a ti— besa mis labios con dulzura— Te amo princesa.

—Y yo a ti.

—¿Y esto?— señala la mesa decorada— ¿Qué celebramos?

—N-No celebramos nada, simplemente quería preparar una cena especial para nosotros.

Sonríe— Eres la mejor— vuelve a besarme.

Nos sentamos y empezamos a comer. Liam bebió vino, yo en cambio bebí agua, lo que hizo que me mirara curioso.

—¿Por qué bebes agua?

—Es que me duele un poco el estómago, no quería que me sentara mal.— miento.

—¿Estas bien princesa? ¿Quieres que vayamos al medico?— pregunta preocupado.

—Si sí, estoy bien.

Cuando terminamos de comer recogemos todo y nos sentamos en el sofá. Suspiro nerviosa, era el momento.

—¿Te pasa algo princesa? Te noto rara.

—Tengo que contarte algo.

—¿De que se trata?

No me salían las palabras por lo que saco la prueba del bolsillo trasero y se la entrego.

Abre los ojos como platos—¿Estas…?

Asiento, no decía nada, me pongo nerviosa—¿E-Estas enfadado?

Entonces hace lo que menos me imaginaba, me abraza con fuerza pegándome a su pecho. Me aferro con fuerza a él.

—¿Cómo puedes pensar que me enfadaría con una noticia así? Me has hecho el hombre más feliz del mundo. Te amo princesa.

Se me llenan los ojos de lágrimas — Y yo a ti.

—¿De cuanto estas?— pregunta acariciando mi estomago.

—Una semana.

—Hay que comprarle cosas, estoy deseando saber lo que será, estoy seguro de que será una niña tan hermosa como su madre.

No puedo evitar sonreír — Aun es muy pronto para saberlo, hay que esperar unos meses para saberlo.

Levanta mi camisa y deja un beso sobre mi estomago. Me sonrojo— Estoy deseando conocerla, estoy seguro de que será una niña.

Sonrío, acaricio su pelo con suavidad.

—Te amo princesa, gracias por esta maravillosa sorpresa.

—Te amo— nos besamos dulcemente.

9 meses después.

Gimo de dolor mientras las contracciones me llegan sin parar.

Mierda, dolía mucho, jamás pensé que llegaría a doler tanto.

—Tranquila princesa, aguanta, ya llegamos.— dice Liam mientras conduce rápidamente hacia el hospital.

Sonrío al escuchar lo nervioso que estaba. Se suponía que yo era la que debería estar nerviosa pero en vez de eso el que parecía más nervioso era él.

Cuando llegamos Liam me ayuda a bajar y entramos. Enseguida se acerca un enfermero con una camilla. Me tumbo en ella y me llevan rápidamente a una habitación.

Poco después ya estaba empujando con fuerza mientras apretaba con fuerza la mano de Liam.

Estaba agotada pero cuando escuche el llanto de mi bebe supe que había valido cada maldito segundo.

Y cuando la sostuve entre mis brazos fue aun mejor. Liam me rodea con sus brazos, me mira con una hermosa sonrisa.

—Bienvenida al mundo pequeña Lia— sonrío mirándola.

Liam deja un beso sobre mi frente— Gracias mi amor, gracias por este regalo tan maravilloso.

—Gracias a ti por todo lo que haces por nosotras cada día. Te amo.

—Te amo princesa— me besa con dulzura.

Lo amo, era el amor de mi vida y siempre lo sería.