El regalo perfecto

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10:30 PM, En una fabrica abandonada, dos chicas se encontraban atadas a un pilar de concreto pegadas la una a la otra.

Mina: Oye Ibara.

Ibara: Si.

Mina: ¿Nunca te has puesto a pensar en como y cuales decisiones de tu vida te han llevado a tu situación actual?

Ibara: Todas las noches antes de dormir ¿Porqué?

Mina: Bueno, es curioso como acabamos en esta situación.

Ibara: ¿Qué cosa exactamente?

Mina: Bueno, empezando desde hoy...

Flashback 11:15 AM

Mina e Ibara: ¡Por favor, por favorsito chulo con un poquito de azúcar!

Kyoka: Bien, pueden ir a probar el resultado de su entrenamiento, de todos modos ya están a la mitad así que supongo que esta bien.

Mina e Ibara: ¡SIIIII! ¡Gracias!

Ambas saltan a abrazar a la asesina, esta se mueve haciendo que choquen.

Kyoka: Solo salgan y regresen a las 6 ¿Entendido?

Ibara: Fuerte y claro, no le fallaremos.

Creo que es obvio que fallaron.

Al salir pensaron en quien podrían atacar, no pueden simplemente golpear a las personas... Bueno, si pueden pero no lo harán, decidieron que si ven a alguien que esta molestando a otra persona o que tenga apariencia de criminal lo atacarían. 

Primero se encontraron con unos extraños en un callejón que se acercaron a ellas con un cuchillo, por la manera en que lo sujetaban al contrastar tanto con la manera de sus mentores notaron que no sabían usar el arma, la chica con piel rosa tomo el brazo de uno de los agresores y apuñalo el ojo de este con su propio filo para luego patear su entrepierna dejando unas manchas de sangre en su calzado, por su parte Ibara tenía sujetos del cuello a dos de los hombres a punto de desmayarlos, los demás corrieron al ver la fuerza de estas dos.

Con la confianza de su primera victoria las chicas fueron a los callejones oscuros acabando a quienes quisieran luchar con ellas, al menos hasta que encontraron a un pequeño de pelo morado, les dijo que como lo salvaron estaba agradecido con ellas y les dio como muestra de ellos una botella de vino hecha por el mismo (los que leyeron el manga sabrán que copie este detalle) decidieron descansar y tomar un poco cerca de las 4, unos minutos después quedaron tendidas en el suelo para ser arrastradas por este enano.

De vuelta al presente.

Ibara: Si, la idea de que un niño nos diera vino hecho por el mismo era muy rara, debimos pensarlo mejor... ¿Por que no has usado tu magia para liberarnos?

Mina: Quiero esperar a que ese maldito cabeza de uvas regrese para derretirle las bolas.

Ibara: En ese caso espero que venga pronto porque me esta dando hambre ¿Crees que Denki-san no vaya a dar algo después de llegar tarde?

Mina: Probablemente no, pero si entramos sin despertarlos podremos comer algo y luego esperar que no nos castiguen muy duro.

Ibara: Tal vez Kyoka-san vuelva a usar su magia en nosotras.

Mina: Espero que no, la ultima vez no fue nada agradable

Ibara: Pero por lo menos no sientes que te  quemas como con la magia de Denki-san, aunque debe de ser muy útil para ahorrar en electricidad.

Ambas rieron un poco con ese comentario, al menos lograron aliviar un poco la tensión del momento, solo para que apareciera el secuestrador con una bolsa llena de botellas de humo lanzando primero una que cubrió a ambas.

entrando al caosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora