Afónico

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Adrien sonreía nervioso al haberse acabado con desesperación aquel extraño brebaje que la ojiazul le había preparado con la condición de poder besarla.

¿Se había visto muy desesperado al habérselo acabado de un solo trago?

En cuanto el ojiverde alzó su mirada, observo como unos lindos ojos azules se acercaban poco a poco a él, totalmente sonrojados.

-L-lo prometido es deuda ja... ja.... JA.

Dijo con una risa más que nerviosa, robótica, haciendo que Adrien en ese momento entendiera lo que estaba por suceder.

¡La iba a besar! ¡No podía ser así!

Tomando su hombro la detuvo, a la vez que con sus manos temblorosas sacaba su celular y escribía lo que quería decirle.

"Ahora no, acabo de tomármelo y sabe feo"

Ella al leerlo parecía estar volviéndose más roja de lo que ya estaba.

-Em... si... supongo que puedo dártelo luego.... SI QUIERES, quiero decir, si no quieres no, no es obligatorio, un beso, digo... um ¡Ah! Eso.

"No me lo perdería por nada del mundo"

La sorpresa se instaló en sus azules ojos, sintiendo como sus piernas querían fallar.

¿Y si... ¡Y si le gustaba a Adrien!?

Rápidamente Marinette despejó esos locos pensamientos, al pensar en que si fueran mayores, probablemente él se tatuaría la frase "Marinette es solo una amiga" en el pecho.

Seguro como el nunca había tenido amigos, no sabía que a las amigas no se les besa en los labios.

Alguien iba a tener que decírselo, pero esa persona no sería ella.

-BUEEENO, es hora de REGRESAR a la escuela. Wooho.

Marinette movió su cabeza de un lado a otro, a la vez que de un salto tomó su mochila y con su rostro rojo, le extendió la de el a Adrien que estaba igual de sonrojado.

Mientras salían, una notificación en el periódico virtual que mañana a mañana le llegaba al celular, lo sacudió frunciendo el ceño al ver el encabezado de la noticia del día.

"Adrien el modelo de goma"

Para después mostrar las fotos de diferentes ángulos de las caídas que tanto sufrió aprendiendo a andar en bicicleta.

Rayos.

Lo único reconfortante era que llamaban como su novia a Marinette, por el beso accidental cerca del labio que afortunadamente si capturaron.
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Marinette miraba como Adrien estaba sentado solo, seguro por no poder hablar y tener un tema de conversación.

El por el contrario, solo estaba escribiendo en el libro de frases para Marinette.

La ojiazul sin preguntarle o mínimo saludarle, tomó su muñeca y lo llevó jalando dentro de un salón semi desierto, no leyendo para fortuna del Agreste, la pasta del libro.

Dentro encontraron a Max, que tenía un aparato extraño con cables, en la cima de su escritorio.

-Adrien quiere probar tu nuevo invento.

Dijo la ojiazul haciendo que el modelo reafirmara lo que pensó el día que la conoció como Lady Bug. Esa chica estaba loca.

Intentando negarse ya que no sabía si aquello era seguro, Marinette abrió la boca, desvaneciendo sus pensamientos de resistencia.

-Oh, no te lo dije. Max tiene un invento nuevo que puede hacer que puedas comunicarte sin que tengas que hablar. Úsalo para que ya no estés solito.

Adrien miró enternecido aquel gesto de la azabache y asintió.

Si había la posibilidad que el en realidad no estuviera enamorado, con esa acción definitivamente ya lo estaba.

El moreno miró con rareza como se estaban mirando melosamente, sintiendo la necesidad inmensa de interrumpirlos.

-Genial, te explico, es un neurotransmisor que dice tus palabras antes de que las digas.

El rubio divisó los azules ojos de la azabache que lo miraban feliz de ayudarlo, no logrando negarse.

Solo agachó un poco la cabeza y se dejó poner aquella extraña corona sobre su frente.

El chico lo encendió y acomodó el volumen, dejandose escuchar sus primeros pensamientos.

-Te amo, te amo, te amo, eres la lady de mis sueños ¿Me esta mirando? ¡Ahh arquitectura de mujer! Oh no, ¿Por qué se escucha lo que pienso?

Esa cosa no decía las palabras antes de decirlas ¡El invento leía pensamientos!

Max no encontraba como apagarlo, mientras los pensamientos a todo volumen de Adrien, los acompañaban como música de fondo.

-Apagalo Max que Marinette se va a dar cuenta que la am... Shalala interrumpiendo pensamiento ¡MAX! Apagalo. Maldito sea el mineral que hizo el metal que hizo la aguja que rompió el condón que tus padres usar...

Marinette se lo arrancó de la frente al estar a punto de sonar los pensamientos que solo son para pensarse y no decirse.

El moreno en lugar de enojarse tras escuchar lo que el chico pensaba, sonrió victorioso por su invento, corriendo a su casillero para contarle a Marcov.

-Tu cabeza es un completo enigma.

Le dijo mientras caminaban fuera del salón, no evitando sonreírse mutuamente.

Ella secretamente también hacía enigmas en su mente, al escuchar la frase que Chat Noir siempre le decía, en los pensamientos de Adrien.

Estaba comenzando a hacer una teoría muy loca que su ceguera no quería aceptar.

Continuara...

5:10 am y yo sigo actualizando sin haber dormido.

Esto dolerá en la mañana.

Ojalá les haya gustado, este capítulo que llevo días queriendo subir.

Por cierto, casi se me olvidaba, quería agradecer a asquerosaaaaa por la maravillosa portada que hizo.

Gracias.

En fin, disfruten

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