Capítulo 4

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Después de los eventos ocurridos en la cárcel, Malek había caído en cuenta de que todo eso era una excelente excusa para encontrarse con la señora Cruz y ella, en su afán de evitar ir a ese sitio horroroso organizó una reunión con varios directores de otras cárceles para establecer un plan de acción ante el creciente movimiento pro- motín que había iniciado Cruz del norte y que se expandía lento pero seguro hasta las oídos de otros reclusos y contagiaban el sentimiento de rebeldía. 

Malek estaba al tanto de su evasiva y sabía que a una mujer de esa edad sólo podía llegarle de una sola forma: con la labia. Entonces se arregló y practicó frente al espejo su mejor sonrisa coqueta antes de salir a la reunión. Está de más confirmar que sus encantos embelesaron por completo a la señora Cruz, quien era sorpresivamente mucho más tímida de lo que la imaginó, o de lo que se describía de ella. Haberle comido el coño a Goya la había reformado de por vida.

- Es realmente admirable todo el trabajo que ha hecho con esas reclusas -

- Ni me lo diga... He pensado en dejar abandonado todo en un par de ocasiones-

- Pero señora Cruz, nadie podría haber hecho un mejor trabajo que usted -

- Por favor Malek, dígame Magdalena - La señora Cruz se sonrojó un poco.

Malek se burló disimuladamente, esa mujer era idéntica a Dolores Umbridge y vaya que había sido en extremo sencillo ganarse su confianza

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Malek se burló disimuladamente, esa mujer era idéntica a Dolores Umbridge y vaya que había sido en extremo sencillo ganarse su confianza. Ambos hablaban mientras los demás directores comían y bebían en una mesa enorme en la casa de la señora Cruz, los asuntos de la cárcel tomaron unos míseros 3 minutos en resolverse.

- Magdalena- Malek se preocupó por mencionar cada una de las letras con cuidado, mientras la miraba fijamente a los ojos. La directora se sonrojó aún más y tomó un sorbo de su bebida.

- Lo del intento de motín lo manejó muy bien -

- No es mi primer intento de motín, siempre he pensado que hay que ser justos pero también fuertes-

- Lo mismo pienso yo pero luego la gente habla de derechos humanos -

Malek se burló - Derechos humanos- Repitió despectivamente - Mano dura con quienes no sirven para esta sociedad, ¿No es así?-

Magdalena Cruz asintió ante esto y levantó su vaso para brindar, todos los demás repitieron su acción - POR EL FUTURO DE LAS CÁRCELES CRUZ-

- SALUD- Brindaron todos, incluido Malek. Una vez bebieron ella volteó a verle de nuevo, empezaba a embriagarse poco a poco.

- ¿Sabe? He tenido que hacer mucho por el bien y orden de las cárceles, pero casi nadie lo agradece - Y como si la gente tuviera la necesidad de mencionarle a Zulema cada vez, sintió la necesidad de contarle una de sus mejores hazañas - Como con la hija de esta mujer, Zulema Zahir. Fue un problema arrancado de raíz- Volvió a beber de su bebida.

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