Ojalá desaparecer,
teletransportarme a un lugar seguro,
aquel que tanto anhelo,
un lugar donde no sea juzgada o menospreciada.
Necesito correr,
huir sin mirar atrás,
ir a doscientos kilómetros por hora sin pensar en la caída,
sólo sentir la sangre entre mis venas,
centrarme en mi respiración,
hundirme en lo más profundo del océano y sentir.
Sentirme viva,
sentir como el oxígeno me va faltando,
sentir como mis pulmones convulsionan,
sentir como asciendo a la superficie,
sentir como mis sentidos se reinician,
sentir de nuevo la vida.
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Versos rotos de una adolescente.
Short StoryLos pensamientos de un alma adolescente, rota y perdida.