Te quiero.
No sé de que manera.
No sé si de la forma en la que debería.
No estoy acostumbrada a sentirme así.
Te preocupas, me cuidas.
A lo largo de mi vida he sentido a medias, siempre aparentando, sin mostrar debilidades.
Contigo es diferente.
Tú eres diferente.
Me dan ganas de saltar al vacío.
Abrir cada una de mis cicatrices.
Confiar en tí.
Pero no sé que siento.
No sé gestionarlo.
No quiero dañarte.
Una herida más sería insignificante para mí.
Pero no puedo herirte a tí.
No cuando eres todo aquello que necesito y que no supe ver.
Todo con lo que cualquier persona sueña.
ESTÁS LEYENDO
Versos rotos de una adolescente.
Short StoryLos pensamientos de un alma adolescente, rota y perdida.