Al salir de la ex-habitación de mi padre, William me preguntó si podría decirle que estaba pasando pero solo me limité a negar con la cabeza. Miré un segundo a Nico y luego cogí mi mochila y me la colgué al hombro, los dos solo me miraban en silencio lo cual me ponía un poco incomoda. Me despedí de Paul, después de prometerle que volvería para visitar a mi abuela y salí sin decir nada mas.
¿Y ahora que haría?
Mi lista había sido corta: Si no era Nico, era Alex. Pero con la reacción de Nico no quería arriesgarme.
Suspiré y seguí caminando.
Cuando llegué a casa estaba totalmente seca, a pesar de la tempestad que se desataba afuera.
Me senté en la orilla de la cama y miré mi palma mientras la cerraba y la abría. Tan cerca, pero tan lejos a la vez.
Una parte de mi decía: Vamos, solo di su nombre. Y la otra me decía: Recuerda lo que dijo Nico, puede ser peligroso. Y sin poder decidirme, pensé en él. En nuestro encuentro y todo lo que había pasado en él. En el sabor de la pizza que comimos, en el Hijo de Sobek y las ganas que tenía de reírme cuando lo vi casi siendo digerido por el cocodrilo gigante. Quizás deba darle tiempo al tiempo, pero ¿tendremos el suficiente?
Tomé la almohada y grité en ella. Mantener la calma nunca había sido una de mis virtudes; Gracias THDA, en estos momentos si que ayudas. Pensé con sarcasmo.
Entonces recordé. Los sueños. Parecía que el foquito de las ideas se hubiera iluminado en mi cabeza.
Me acosté en la cama, sin siquiera sacarme los zapatos y le pedí a Poseidon y Atenea que me ayudaran, pero no funciono.
Solo soñaba en blanco, sin nada.
-¿Intentando dormir? -preguntó William mientras estaba apoyado en el marco de la puerta-. Quizás no sea un bonito día pero no es como para dormir a las 3:00pm.
-¿Qué haces aquí?
-Despues de que salieras "corriendo" de allí, decidí seguirte. Nico me dijo que no lo hiciera pero –se encogio de hombros despreocupado- nunca he sido bueno obedeciendo.
-De eso me he dado cuenta.
-¿Qué ocurrio? -me preguntó cambiando de tema mientras se sentaba en la cama.
-No puedo decirlo.
-Solo dilo, quizás te pueda ayudar -insistió.
-Te podría poner en peligro. Nico dijo que no lo dijera, que ni siquiera debía sospechar que era verdad.
Pero aún asi William siguió insistió.
-Sueltalo -dijo sentando en la cama mientras cruzaba los pies-. Yo soy tu diario.
-Nunca he hecho uno -admití.
-¡Por Ares! A ti sacarte información es mas frustrante que complicado -tomó un respiro-. Soy tu consiencia entonces.
Lo miré un rato pero luego suspiré .
-Vas a prometer no decir nada. Ni si quiera a tus padres. O al menos no hasta te lo diga. ¿Guardaras el secreto?
-Lo juro por el Estigio -dijo el serio.
-Okay. ¿Alguna vez has oído de la mitología Egipcia?
Y asi fue como William. Hijo de una de las personas con las que me menos congeniaba mi padre, alguien a quien no conocía de hace mucho, se enteró de mi secreto. Mucho antes que Alex y mucho antes que mis padres.
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La hija de semidioses (Percy Jackson)
Fanfiction"Me han borrada la memoria, me separaron de mis padres y me arrebataron a mi hermana." Ariadna piensa que al enterarse de que es una semidiosa, las sorpresas acabarían, pero ni siquiera han empezado. Al realizar una misión en la que conoce a un mist...