La raza antigua

I

Me encontraba sentado en mi cama con un terrible dolor de cabeza y una resaca de los mil demonios, no recordaba nada de los 3 o 4 días anteriores, no podía saberlo con exactitud en estos momentos, no sabía a donde había ido, dado a la ropa tirada por todo el lugar y el olor a sucio de la ropa, algunos tenían lodo o al menos eso parecía, me levante para poder refrescarme y rehidratarme ya que mi boca estaba bastante seca al grado de estar áspera y sentir las papilas gustativas, mis músculos de todo mi cuerpo me dolían y apenas pude llegar al refrigerador para poder sacar el agua, de inmediato me acabe la botella de dos litros, me senté para poder tratar de recordar que había pasado en estos días de ausencia y porque no me acordaba de nada.

Sin embargo, mi cabeza estaba hecha un caos y no recordé absolutamente nada, lo único que pensé fue que me había salido a tomar con unos amigos por lo que decidí ir a comprar unas pastillas para el dolor de cabeza y reducir el dolor. Justo después de comprar las cosas llamé a mis amigos más cercanos para saber si salí con ellos, pero su respuesta fue negativa, me sorprendió un poco en la última llamada de mi amiga Karen, ella era muy amable conmigo, me gustaba pasar el tiempo con ella, y... Ella me dijo que hace cinco días, me comuniqué con ella diciendo que iba a salir por unos cuantos días, me preguntó en esos momentos el destino, pero le dije que no le podía decir, era por su propia seguridad, y solo eso me pudo decir, nos quedamos de acuerdo para vernos más tarde y poder platicar, me dirigí a mi casa para poder descansar y así ir con ella.

Más tarde, fuimos a comer y poder platicar, su asombro al ver un tatuaje con unas letras indescifrables, hasta el momento no me había dado cuenta ni mirado en un espejo, había omitido todo, ahora entendía porque todas las personas se me quedaban viendo un poco raro, me tomo una foto con su celular lo cual se me hizo bastante extraño que no me percatara de ello si use mi celular y no lo había visto con el reflejo, tal vez el dolor que no había disminuido con las pastillas hizo que no me percatara de ello.

Platicamos por varias horas, pero no obtuvimos respuesta de mi fugaz desaparición, pero algo en mi durante toda esa platica me dio un poco de miedo y no quería saber hacia dónde fui, tomé algo más fuerte que una simple aspirina, fui a comprar el típico paracetamol con más gramos que tenía para poder disminuir el dolor, pero pasadas las horas seguía aquel dolor, de tanto dolor ya estaba como sedada mi cabeza, abrí mi computadora para buscar aquellas letras o lo que fuera aquel maldito tatuaje, busque y busque y no hubo un resultado concreto, hasta me metí a páginas ocultistas y magia negra o hechicería, no sabía que era realmente todo eso, lo cual no creía en nada de eso, ni en religión, pero por mi cabeza se cruzó la idea de que me haya gustado algún símbolo y me lo haya hecho en esa borrachera, pero esas páginas de internet tampoco me dieron resultado.

Pasó la noche y ya me sentía bastante agotado, me fui a recostar con el dolor persistente, tal vez me falte dormir para calmar todo esto y tal vez en mis sueños recordaría algo de todo lo sucedido, ya me estaba ganando el sueño cuando un leve susurro me despertó de golpe, no había entendido nada de lo que dijo, solo me dio miedo al tener una voz áspera y ronca que retumbó en mis oídos, volví a tratar de dormir pero justo antes de dormir volvió a sonar aquella voz con un lenguaje que no entendía, tal vez la esquizofrenia me estaba llegando en aquellos momentos de desaparición, eso podría explicar muchas cosas, sobre todo aquella voz que impedía que me durmiera, un olor nauseabundo comenzó a recorrer toda la habitación, y unas sombras de menos de cincuenta centímetros recorrer las paredes con unos ruidos un poco extraños, como si se trataran de roedores recorriendo las paredes de mi hogar.

En definitiva tenía que ir al día siguiente a hacerme unos estudios para ver si había sufrido alguna contusión o que me dieran razón de mi pérdida de memoria momentánea, pero primero tenía que dormir, esto me estaba matando, me daba un poco de miedo al ver aquellas sombras haciendo movimientos extraños como si estuviesen haciendo una clase de danza y ofreciendo a algún dios desconocido por los humanos, con solo pensar eso, un frio recorrió todo mi cuerpo y haciendo que sudara frio, la voz ya se estaba haciendo más y más fuerte al grado de que estuviese platicando con alguien en la misma habitación, era un lenguaje extraño que no podía entender, sabía que era un lenguaje ya que repetía mucho una palabra que en mi propio lenguaje era bastante difícil de poder repetirlo o incluso de poder escribirlo ya que ¿cómo podría escribir algo que no sabía repetirlo?

Me pude dormir horas después que me había acostumbrado aquella voz insistente en no dejarme dormir y aquellas siluetas junto con el olor, me desperté alrededor de las 12:00 p.m. Tal y como había pensado, el dolor de cabeza se redujo bastante, aún me dolía, pero no como el día de ayer, miré el teléfono y mi asombro fue mayor ya que me dormí por dos días seguidos, fui directo al doctor para que me mandará a hacer algunos estudios y revisara lo que me había pasado, pasé toda la tarde y parte de la noche en aquel hospital para hacerme los estudios necesarios y al día siguiente me daban los resultados, al llegar a casa volví a escuchar esa voz siniestra, pensé por un momento creer que algo se escondía dentro de la casa por lo que revise si era alguna clase de broma y que una bocina estuviese sonando, y con una cámara escondida para ver todos mis movimientos y así, hacer esa broma pesada, pero no encontré nada, me metí a bañar y tratar de dormir, esta vez iba a poner una alarma y que sonara con mi bocina así no me volvería a dormir durante dos días.

Al día siguiente me desperté sin ningún contratiempo, es más, me desperté justo antes de que la alarma sonara, me volví a bañar para ir por mis estudios, y justamente al salir de bañarme y revisar la hora, un pánico se apodero de mí, nuevamente había perdido dos días dormido ¿qué me estaba pasando? ¿por qué perdía tantos días dormido? Lo único bueno era que el dolor de cabeza había desaparecido, me fui al doctor y le pedí disculpas comentándole lo que me había pasado, mis resultados no obtuvieron algún daño en el cerebro y que estaba completamente sano, me mando con una psicóloga muy buena para que me ayudara, me retire del lugar y justo al cruce de un puente, en una avenida pude ver personas colgadas de la cabeza, como si se tratase de alguna cuenta por saldar, lo sorprendente era que nadie, absolutamente nadie podía ver aquellos cuerpos, le pregunte a una mujer que pasaba —oye disculpa, se que sonará rara mi pregunta pero, ¿ves algo raro ahí en ese puente, algo como si estuviese colgado? Es que no alcanzó a ver bien, me esta fallando la vista— mentí para que no sonará como un loco, y me dijo ella que no había nada en el puente, le di las gracias y me fui directamente con la psicóloga, me dijo que iba a tratarme, pero que esto, tardaría un poco, acepte y me fui a casa no sin antes llamarle a, Karen para ver si podíamos comer juntos y contarle todo lo sucedido, ella accedió y nos vimos más tarde.

Me llenó un poco de alegría poder verla, poder escuchar su voz cerca tan dulce me dio esperanzas y se me olvido por completo aquella voz siniestra, había decido ocultar con una venda ese tatuaje para que nadie se me quedara viendo extraño, ella me dijo que debería quitármelo con láser, pero me daba un poco de miedo volver a sentir aquel terrible dolor de cabeza y hasta que no resolviera lo que me había pasado, me lo quitaría, me aconsejo que fuera con alguien para que me ayudara a descifrar lo que significa o si solo eran garabatos, y me dio una dirección con una persona bastante estudiosa en jeroglíficos y maestro especializado en culturas antiguas, dijo que era muy inteligente.