Capitulo 6

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Podía vislumbrar que el día estaba sumamente hermoso afuera. Pero aún me sentía un poco indispuesta. Por más que tratará de decir lo contrario.
No puedo creer que Dylan nos allá encontrado en una pose tan comprometedora. Arg... Me tape la cara con las manos. ¿Que pensara de mi?

Alguien tocó a la puerta, haciendo que me sobresaltara en la cama. Cada cosa me tenía con los nervios a flor de piel.

— Adelante. — Dije sin mirar.

— Veo que te estás peleando internamente. — Escuché la voz de Dylan.

Alce la vista hacia la puerta y este me sonrió, mientras se apoyaba en el marco.

— No digas nada. — Le advertí.

Abrió los ojos muy sorprendido y luego soltó una carcajada.

— Yo no iba a decir nada. — Dijo muy ofendido. — Bueno... Tal vez si.

Lo fulminé con la mirada. No quería oír sus bromitas pesadas al respecto.

— Por favor... No vayas a pensar mal de lo que viste hace un momento. — Le dije mirando hacia la ventana. — Él solamente me ayudó para que no me cayera al suelo.

— Y yo no lo crítico. — Me dijo mientras cerraba la puerta y caminaba hacia la cama.— Yo hubiese hecho lo mismo amiga. Pero admito que me tomaste completamente desprevenido.Osea no todos los días se ve algo como eso.

Negué con la cabeza.

— Aunque debes admitir que está buenísimo. — Dijo riendo.

Lo miré con la boca abierta.

Lo golpee en el brazo

— Dylan por favor,cállate. — Le dije mientras lo volvía a golpear. — Esto es muy vergonzoso para hablar estas cosas contigo.

— Jajaja, Pero que tienes. —. Dijo sobando mi mejilla. —. Y sabes qué es la verdad.

Infle mis mejillas con rabia. Era algo que siempre hacia cuando estaba enojada.

— Haber... Sé completamente sincera conmigo. — Dijo mirándome como el investigador que era. — ¿Qué es lo que está pasando? Eres mi mejor amiga y te conozco y sé que algo te está pasando.

Me miré los dedos de las manos. No sabía que decir. Pero fuera lo que fuera que le dijera, no contaban con que Velkan los escuchaba del otro lado de la puerta.Velkan había ido a ver cómo seguía la señorita Katherine, y se dio de cuenta de que el joven Dylan se encontraba con ella.

Obvio había tenido una charla con él joven chico, ya que no quería que mal interpretará lo que había sucedido hace un rato en la habitación con la señorita Davis. No quería que su reputación como caballero quedará por los suelos.

Flashback.

Caminaba detrás del joven Dylan quién estaba apunto de irse a la cocina.

— Dylan... — Lo llame para que se detuviera.

— Dígame su majestad. — Se paró en seco.

— Quiero hablar con usted de lo que acaba de pasar hace un rato en la habitación de la señorita Katherine. — Dije seriamente. No quería que se fuese a esparcir el chisme. Y dejarán en mal su nombre.

— No me lo tome a mal lo que le voy a decir. — Me dijo seriamente. — Pero Kate es mi mejor amiga. No... Corrección. Es como mi hermana. La quiero a ella tal cual como quiero a Kathleen, Y jamás haría algo para perjudicar las a ninguna de las dos. Pero no quiero que usted. Por más título de príncipe se vaya a querer aprovechar de ella. Porque eso no lo voy a permitir.

El legado del príncipe oscuro Libro 1 (En Redacción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora