Enemigos| ᴹᴱᵂᴳᵁᴸᶠ

Capitulo 10

ᴰᴵˢᶜᵁᴸᴾᴱᴺ ᴸᴼˢ ᴱᴿᴿᴼᴿᴱˢ

Mew

—¡¿Pueden callarse un poco?!—gritó Max golpeándose la cabeza contra la ventana.

Tul y Gulf estaban haciendo un coro en el auto de camino a casa desde el hospital.

—Work...Work..Work...Work—cantaban desde sus asientos, sonreí mirando al niñato. Estaba mucho mejor y había recuperado su energía contagiosa, que al parecer Tul también tenía y eso le hartaba a Max.

—Llegamos cotorras—rieron, ayudé a Gulf a bajar y entramos a casa donde los demás nos esperaban sentados.

—¡Gulfy!—la pequeña Samantha corrió hacia Gulf, él sonrió y la levantó.

—Hola nena—besó su mejilla haciendo gruñir a Bright—A ti también te extrañe Bright—le tiró un beso haciéndonos reír, claro menos a Bright.

—Es un gusto tenerte aquí de vuelta, bastardo—Krist palmeo su espalda.

—Bienvenido—dijo Kao sonriendo.

—Vamos que tienes que descansar—tomé su brazo con delicadeza.

—Entonces yo supongo... nos vemos Gulf, diré que estás de vacaciones—Tul lo abrazó.

—¿Te vas a quedar solo en casa?,¿sabes que es peligroso?—le preguntó Gulf preocupado.

—Lo sé, pero estaré bien, nos vemos—saludó a los demás con un asentimiento.

Una idea apareció en mi cabeza.

—Espera—todos me miraron.—Puedes quedarte aquí, en el cuarto de Max sobra espacio—Gulf me sonrió y miró a Tul.

—Pero...—interrumpí a Max.

—Bueno—sonrió—Iré a casa a buscar ropa y eso, vuelvo en un rato—cruzó su mirada con Max y se fué.

—Vamos—tomé a Gulf de la cintura y subimos a su nueva habitación, la nuestra.

Bostezó y se sentó en la cama, lo ayudé a sacarse la ropa y desinfecté sus heridas como tenía que hacer por unos cuantos días.

—¿Porque haces todo esto por mi?—volvió a bostezar.

—Porque si niñato, a dormir—se acomodó bajo la frazada como un niño pequeño y me acosté a su lado.

—Mmm...gracias, nadie había sido tan bueno conmigo—susurró acomodándose en mi pecho.

Lo miré y confirmé que estaba dormido cuando soltó un bajo ronquido.

Acaricié su cabello y me imaginé lo dura que había sido su vida, él no se merecía ser tratado mal.

Especial Pov Max

Tomé el segundo vaso de vodka, eran las 2:00 de la mañana y no podía dormirme. Me alerté al escuchar un auto, la manija de la puerta giró y un hombre entró por ella.