Cap VI

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Y luego de una semana el equipo de Roy Mustang se infiltró en aquel psiquiátrico, había sido difícil hacer que contrataran a sus mejores hombres, pero lo logró.

El psicólogo Jean Havoc era el único de los psicólogos que tenía ciertas restricciones, lo que hacías que los demás sospecharan más.

La guardia de seguridad Riza Hawkeye también tenía algunas restricciones con no entrar a ciertos lugares, pero ella no se preocupaba ya que tenía muchos trucos bajo la manga sobre todo si estaba al mando del "doctor" Roy.

ya se terminaron uniéndose algunos psicólogos doctores y guardias quienes pertenecían al equipo de Roy, pero claro que esto de psicólogos, doctores y guardias no era más que una fachada para poder infiltrarse, ya que, su trabajo real era ser "detectives especiales".

Así que una semana después comenzó la acción.
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Havoc aminaba por los pasillos del hospital, hace una semana había quedado curioso por el chico pirómano, parecía ser un chico misterioso, no parecía ser una persona mala al contrario yo sí cómo fue en el caso de Edward pensaba que tal vez el chico pasaba por lo mismo.

Aunque revisando sus expedientes se dio cuenta de que si era pirómano pero de que los medicamentos que le recetaban no eran los indicados, le hacían sufrir, definitivamente no era los medicamentos que se necesitaba para tratar a alguien con piromanía.

También las sesiones de terapia no eran las correctas, qué se dedicaban a ver si es que el chico avanzaba o no con respecto a su tratamiento.

Así que como él era el psicólogo nuevo tenía un poco de poder, es decir no podía negarle nada porque sino ya verían que había algo raro, por lo tanto tendrían que ser más inteligente cosa que no era.

Pidió tomar en sus manos el caso de Edward Elric y del otro muchacho, Ellis Miller, el chico que atrajo su atención.

Una vez hecho su cometido se acercó hacia su jefe diciéndole que ahora Edward Elric está bajo su cuidado.

- Me parce un trabajo estupendo - mencionó - hay que darle está noticia los hermanos elrics

- Si, por cierto jefe, decidí tomar el caso de otro chico, es dos años mayor que Edward - menciono mostrándole los documentos - pensé en que sería mejor tener dos ya que el caso de Edward y de este chico son similares

- Así tendremos más pruebas, muy bien - le entrego los documentos de vuelta - Entonces en tu horario te toca con ese joven, ve mientras yo hablaré con los Elric

- Si señor -.

Camino hacia su oficina, habido la puerta y el pelirrojo ya se hallaba adentro

- Esto es trampa ¿Sabes?, Te dije que te diría mi nombre la próxima vez que nos viéramos, pero te adelantaste - sonrió divertido

- Necesitaba empleo de forma urgente, bien, empecemos - menciono cerrando la puerta y sentándose en su silla y así el interrogatorio comenzó.

Las horas pasaban, nada fuera de lugar, de un momento a otro la sala quedó en silencio total, pero no era un silencio incómodo inquietante, era bastante tranquilo.

Ellis miraba con atención lo que hacia su nuevo psicólogo, recordó a sus anteriores psicólogos y puso una muñeca de susto que no paso por alto ante Havoc.

Se disponía a preguntarle y la puerta fue golpeada interrumpiendo lo que el psicólogo quería decir

- Adelante - lentamente la puerta se abrió dejando ver a un hombre de cabello verde y largo

- Un placer, soy Envy, el psicólogo anterios de Ellis, me dijieron que si tienes algún problema que debería ayudarte, pero dudo que eso pase - sonrió - Ellis es un buen chico y estoy seguro de que te dirá lo mismo que me dijo a mi, el siempre habla con la verdad - miro aEllis de una forma aterradora que solo él pudo ver - ¿No es verdad? - la mirada del joven pirómano se transformó en una de terror, su cuerpo empezó a temblar y comenzó a sudar frío -Bien,nos vemos en el almuerzos - se fue

- ¿Ellis? - dijo Havoc - ¿Algo que me quieras decir? -

El joven no pudo evitarlo y puso su mano en su boca para evitar sollozar, y se dejaron ver lágrimas caer por su rostro, el hombre asustado soltó sus cosas y corrió hacia el agarrándole de los hombros

- Ellis...¿Que pasa?

- Él...Tu....¡¡NO!! -grito con fuerza empujándolo  y separándose,se levantó del suelo - Pensé que eras distinto- menciono - todos en este lugar son iguales...

- Ellis cálmate - mencionó intentando acercarse

- NO... - en la cabeza del chico pasaban muchas cosas, torturas y medicamentos peligrosos

- Ellis

- NO!! DEJAME !! - pero quién adivinaría que está conducta fue por una droga tardía que pusieron en su desayuno

- ELLIS!! - se acercó rápidamente abrazándolo para dejarlo inmóvil

- No...déjame por favor...no quiero...no quiero - mencionó a entre llanto, Havoc se dejó caer al suelo con Ellis, la cabeza del pelirrojo reposaba en el pecho de este mientras aún lloraba, mientras el rubio intentaba consolarlo.

La sala volvió al silencio, un silencio triste y lleno de pesadez, la mente del psicólogo quedó en blanco, eso era, un espacio blanco y vacío que pronto un olor comenzó a invadir le, frutos rojos, siguió ese olor notando que era el cabello del paciente, era un olor bastante agradable para el momento.

-Lo siento..no se que me pasó - mencionó el pelirrojo de forma suave, el no había correspondido el abrazo pero se dejaba abrazar

- Tranquilo, yo estoy aquí para ayudarte, a ti y a Edward,no para hacerte daño -le abrazó con más fuerza, apoyo su cabeza sobre la del pelirrojo.

Este quedó un poco sorprendido, hace mucho tiempo no sentía esa calidez,esa sensación de que alguien se preocupaba por él, y le dolió saber que Havoc lo hacía solo porque era su paciente.

Sick [fma/royed]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora