Reviviscencia: Como no ser pobre en mi segunda vida.

12- Un buen hermano

Mi presentación no duró mucho, solo hablé de mi mismo, aunque no había mucho que comentar, aunque al ver la clase llena de niños, futuros prospectos de la sociedad, no pude evitar agregar un poco de motivación a mi discurso.

Aunque no creo haber tenido el resultado esperado.

"—por eso es importante que se concentren en sus estudios, una vez que tengan un trabajo cómodo con un sueldo más que suficiente pueden concentrarse en jugar en su tiempo libre, deben apuntar alto—" enfaticé levantando mi dedo "¡Trabajar poco! ¡Ganar mucho! ¡Ese es el sueño!"

Los niños me miraron como si estuvieran lidiando con un alien, sin embargo, algunos adultos me dedicaron unos aplausos mientras que otros por alguna razón lagrimeaban.

Ey ey ~ ¡mi discurso no era para ustedes!

'No puedes culparlos, al final, son ellos los que realmente entienden a lo que te refieres'

¡Pero se suponía que debía inspirar a las nuevas generaciones! ¡No hacer que los adultos tuvieran una introspección!

'¿Quizás es tu falta de inocencia? ¿Y si juegas más?'

¡Bah! No importa.

Niego a admitir que volví a mi lugar con el rostro completamente sonrojado, si algo bueno hay en esto, es que Nani estaba tan avergonzada como yo, probablemente ni siquiera escuchó ni una palabra de lo que dije.

¡Maldita sea! ¡No estoy llorando por dentro!

Esto es realmente vergonzoso.

Respiré varias veces para calmarme, espero que esto sea algo de lo que pueda olvidarme rápidamente...

Si, claro—lo mismo quería que hicieran con lo de "separar a una profesora de su marido" pero NOOOO, ahora todo el mundo habla de eso cada vez que mencionan mi nombre.

Nadie recuerda lo bueno, como los seminarios de metodología de educación que solicité (Forcé) a la escuela que implementara para actualizar a los profesores y sus métodos arcaicos.

'Aún me sorprende que no entiendas porque los profesores no te aprecian'

¡Bah! Nada de eso importa, lo que importa es—

"¡!"

No pude evitar levantar una ceja al sentir como alguien estaba estirando la manga de mi camisa, solo giré mis ojos para no llamar mucho la atención, era la chica que había hecho la presentación antes de mi, pelo castaño que bajo la luz del sol podría parecer naranja, ojos miel con un brillo claro y la cara completamente roja.

Por alguna razón me parecía conocida, aunque no lograba ubicar su rostro, pero su mirada tímida hacía que algo dentro mío se moviera, como si una fuerza de habito tomara el control de mi musculo levanté mi mano y acaricié su cabeza.

...

¡¿Qué carajos estoy haciendo?!

'Mira que no poder controlarte, todo un pervertido'

¡No es el momento ni el lugar!

Detuve la acción apenas en el momento que me di cuenta de que la estaba realizando, pero no logré salvar cara, la niña estaba temblando...diosa sabrá que estará pensando de mi.

'Jejeje'

... ¿Realmente lo sabes?

'¿Hummm?'

No conseguiré respuestas de ella, maldita sea.

Bueno, haré lo más sensible que alguien como yo puede hacer en estos momentos.