Cuando llegó la hora de la salida me despedí de mis amigas, tenía que irme a casa antes de que mamá comenzara a preocuparse, además me había dicho que hoy cenaríamos hamburguesas si me portaba bien. Como no quería ir sola busqué a Gilt apenas sonó la campana, pero no lo encontré dentro de la clase, fui a la entrada de la escuela y lo esperé ahí.
No sé porqué pero desde que comenzamos la primaria Gilt habla cada vez menos conmigo, lo que más me molesta es que cuando se queda en casa ya no quiere bañarse conmigo, le pregunté a mi mamá pero solo dijo "Gilt ya está en esa edad" pero realmente no entendí a que se refería.
Cuando por fin apareció simplemente me sonrió y vino hacia mí. Detesto que finja que no hizo nada malo, fui con pasos fuertes a reprocharle el haberme hecho esperar, pero apenas me puse frente suyo apretó mis cachetes con sus palmas, haciendo que produjera el sonido de un pedo.
Estallé de risa, cuando por fin me calmé el comenzó a caminar y corrí detrás de él.
Siempre era así, cada vez que me enojaba con él sabía cómo hacer que me calmara.
Y siempre comenzaba a caminar antes que yo.
...
Gilt siempre fue raro, desde que éramos pequeños, recuerdo que siempre hablaba de una forma rara. Por suerte ya no me habla así, pero me molesta un poco que siga diciéndoles a las profesoras lo lindas que son.
No sería tan molesto si no fuera porque solo trata así a las profesoras que realmente son bonitas, en cambio, a mí ya no me dice que soy linda.
Solo me di cuenta de esto en el segundo año de primaria, y desde entonces no pude dejar de notarlo.
¡Lo que me molesta más que nada es como trata a mamá!
A veces después de bañarme los encuentro juntos viendo la televisión, Gilt con su cabeza recostada en el regazo de mamá.
La primera vez que los encontré hice un berrinche gritándole a Gilt que ella era mi mamá.
Pero últimamente me molesta otra cosa.
Mamá...
¡Él es mi Gilt! ¡Deja de robármelo!
Vuelvo a la realidad cuando siento dos palmas apretándome los cachetes nuevamente. Por lo visto los había inflado sin darme cuenta.
Frente mío se encuentra Gilt sonriendo como siempre, solo se da vuelta sin decir nada y sigue caminando, corro para alcanzarlo y ponerme de su lado.
Al llegar a casa mamá nos recibe como siempre, y por alguna razón tenía preparada la merienda para los tres.
"Tía Nana llamó y dijo que Gilt se quedara esta noche"
Me puse feliz al escuchar eso, merendamos juntos y luego entré a bañarme. En la ducha me puse a pensar en lo que jugaría con Gilt, o quizas podíamos ver alguna película y luego dormir juntos.
Me sonroje de solo pensarlo.
Salí y tras vestirme fui corriendo a la sala, fue entonces cuando escuché la voz de mi mamá.
"¿Vas a entrar a un colegio distinto al de Tina?"
Quedé paralizada al escuchar eso, por alguna razón mi cuerpo se movió solo y me puse contra la pared para esconderme.
"Así es tía, quiero entrar al Principado Nacional, eso será de aquí a dos, pero debo comenzar a estudiar para conseguir la beca"
¿Gilt irá a un colegio diferente al que yo iré?
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Reviviscencia: Como no ser pobre en mi segunda vida.
JugendliteraturGilt era un hombre sencillo, vivió su vida en forma simple. Convencido por películas e historias que algún día encontraría su destino, pero a medida que maduró fue superando todas esas fases, uno tras otros sus sueños fueron convirtiéndose en fantas...