Reviviscencia: Como no ser pobre en mi segunda vida.

5- "Pipí"

La atención de toda la clase estaba apuntada a mi persona, cualquiera pensaría que con la mente de un adulto estar al final de la mirada de más de una decena de niños es prácticamente un juego, pero con mi pequeño tamaño el mundo parecía difuminarse y sentía como si la gravedad aumentara cien veces por la presión de tantos pares de ojos.

La sonrisa confiada que tenía cuando dije que me hice pipí en la cama desapareció de a poco.

Oh...creo que hice más de lo que puedo manejar, mejor recurro a las profesoras.

La señora Blanca seguro me puede sacar de esta.

Pero cuando miro hacia ella...

Oye, Profesora Blanca, no tiene porqué mirarme igual que los niños, sé que dije algo extraño, pero no es como si fuera un bicho raro...

Entonces la señorita Malva.

...

No...señorita Malva ¿porque me mira así?

Esto duele...definitivamente no estaba preparado para esto.

'¿Entonces por qué lo hiciste?'

¡¿Y qué más se supone que haga?! Si no decía algo para que olvidaran lo que Tina dijo ¡todo iba a terminar como en mi otra vida!

Poniéndome rojo hasta las orejas y sintiendo como mi cara estaba tan caliente que derretiría hierro, me senté.

Otro largo silencio ocupó la clase hasta que los niños estallaron de risa.

Ah, si...búrlense, esto es mejor que la alternativa.

'Solo como referencia ¿Qué sucedió en tu vida pasada?'

La profesora Blanca comenzó a aplaudir para llamar la atención a los niños y dejaran de hacer bullicio.

Por lo que quedara de su vida escolar hasta la primaria a Tina le dirían Tití, lo cual, si me preguntas, no es tan mal nombre. ¡Pero! Los niños comenzaron a burlarse de ella y no pudo hacer amigos hasta que la mitad de la primaria.

'Uff...eso es duro'

Si, lo sé, eso es lo que quería evitar, traté de pensar en otras alternativas, pero estoy lidiando con niños, realmente la única manera de evitar que se burlen de ella y le den ese nombre es que se burlen de mí.

'¿No podías simplemente ser su amigo y ya?'

"..."

'¿?'

"......"

'No pensaste en eso ¿no?'

Creo que es más importante prestar atención en clases.

Guardándome el bochorno en mi corazón saqué un libro que aún no había terminado de leer. Era lectura fuerte, es decir, no para niños.

"Inferno" de Dante Alighieri.

Obviamente no puedo leer esto frente a otros adultos, ya pasé por esa experiencia con mamá y no fue nada agradable, así que cubrí el frente y su detrás con la tapa de un cuaderno infantil que tenía el dibujo de una abejita volando sobre flores de letras.

Comencé a leer mientras escuchaba a la profesora Malva que daba algunas explicaciones con respecto al horario.

Realmente me sirvió esforzarme en aprender a utilizar el pensamiento paralelo, me costó tres años, pero logré poder realizar dos actividades al mismo tiempo siempre y cuando utilice diferentes sentidos para cada una, es decir: puedo leer perfectamente mientras presto atención a lo que la profesora dice sin que una actividad afecte a la otra.