Uno.

5.1K 303 179
                                    


Habían solo un par de cosas que necesitabas saber para conocer a Donghyuck, no eran muchas (ya que el mismo se definía como una persona simple, bueno, simple no, él era fabuloso, gracias. Sencillo era la palabra correcta, Fabuloso y sencillo), pero si bastante significativas en ese desastre que él llamaba vida.

Primero, su más grande sueño era ser actor, de obras musicales para ser exactos. Ansiaba estar bajo el foco del espectáculo y llenarse de los aplausos del público. Quería ser tan grande como Menzel y Hepburn y recibir al menos cincuenta premios Tonys. Pero como eso aún estaba lejos de cumplirse, se conformaba con obtener el papel principal en la obra de primavera en su escuela. Ese año harían Amor sin Barreras, y aunque lamentablemente no podía aspirar al rol femenino principal (que era el mejor de todos), ansiaba obtener el rol masculino que era igual de bueno.

Segundo, era pésimo en todas las asignaturas que no estuvieran relacionadas al arte, lo que era casi todas las asignaturas de su escuela. Pero en la que le iba peor era matemáticas. Las ecuaciones, los múltiplos, los números que se transformaban en letras, todo eso en general representaban un dolor de cabeza magistral para él y se veía reflejado en sus notas que no habían hecho más que ir en descenso desde el comienzo del año. Eso era un problema porque si no mantenía una calificación decente en la mayoría de sus asignaturas, no podría actuar ni como árbol número tres en la obra. El resto de sus notas estaban medianamente bien, pero matemáticas, oh Jesús, en matemáticas iba tan mal que juraba que Pascal estaba retorciéndose en su tumba.

Y por último, pero no menos importante. Donghyuck tenía una suerte terrible, como si hubiera roto un espejo, pasado debajo de una escalera y se hubiese frotado la cara con cien gatos negros, ¡todo al mismo tiempo! Nunca nada de lo que se proponía de cumplía, y siempre estaba involucrado en las peores situaciones.

Quizá por eso estaba metido en esta situación, por culpa de su suerte. Y para hacerlo peor, su cerebro había decidido apagarse en ese instante, como si tuviera un examen de matemáticas en frente y no a una de sus amigas acabándole de confesar su amor. Él no creía que estas cosas pasaran en la vida real, porque si, él era guapo y buena gente, pero nunca antes había tenido a alguien confesandose de esa manera. Según él, eran cosas que solo pasaban en los mangas shojo y los fanfics de wattpad, pero no, ahora también le pasaban a él. 

¿Y qué fue lo primero que se le ocurrió decir? —No, gracias, soy gay. —había murmurado para su propio shock y el de Aeri, que se había quedado en silencio. 

Donghyuck no estaba orgulloso de sí mismo, se aborrecía en ese momento. 

No era la manera en la que se había imaginado el hablar del asunto. A decir verdad, tampoco se había imaginado tener que decírselo a Aeri precisamente, porque si eran amigos, pero no ese tipo de amigos. Le acaba de confesar a la muchacha que le gustaban los chicos, o bueno, ella le había prácticamente obligado a eso después de insistir en una razón del por qué él no quería salir con ella, pero ese no era el caso. Eso no era asunto de ella, no era asunto de nadie y sin embargo se lo había dicho. Era un idiota con creces.  

—¿Qué... ? ¿Eres gay? 

Hizo una mueca, ojeando el pasillo de forma disimulada en busca de alguien que pudiera oír aquello. No importaba que ella lo supiera, pero ese seguía siendo  de alguna forma su secreto y no quería que nadie más se enterase. No solo porque lo pudiesen molestar con ello, si no porque sencillamente no era asunto de nadie. Él no era participe de el "tener que salir del closet", porque , por amor a todos los santos, era el siglo 21 y ya estaba más que claro que la heterosexualidad era normativa y que no todo el mundo se guiaba por ello, pero aún así no quería que el tema se regara por ahí. Donghyuck quería ser el centro de atención, si, pero en el escenario, no en los chismes de los pasillos de su escuela. 

Se dice que le gustas ➳  MarkhyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora