Catorce.

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A Donghyuck le gustaría decir que no era del tipo de persona rencorosa; que el enojo y él no cabían juntos en una oración, que olvidaba fácil cuando lo hacían molestar y que podía volver a la normalidad en cuestión de horas, o incluso minutos. Pero la verdad él no era así.

Cuando alguien le ofendía, le resultaba difícil dejarlo pasar y no dudaba en atacar de vuelta (muchas veces se había metido en una pelea, tanto verbal como fisica por lo mismo), a Renjun le gustaba molestarlo diciendo que tenía que ver con ser un Géminis, pero él no le hacía caso y siempre le rodaba los ojos cuando su amigo le hablaba del horóscopo. Esa era la personalidad que le había tocado y ya estaba, las estrellas no tenían culpa de nada.

Claro, que fuese del tipo odioso y difícil no quería decir que fuese vengativo. Para él la venganza era una acción de último recurso, porque era fiel creyente de no desperdiciar su tiempo en personas que no lo valían, pero si se hacía cargo de dejarle saber a la otra persona lo molesto que estaba y que no dejaría de estarlo hasta recibir algo a cambio.

A veces, ese algo era una disculpa sincera, pero en el caso de su hermana, resultó un desayuno completo el día lunes antes de irse a clases. O bueno casi.

Le había hecho la ley del hielo a Dongsoon durante el resto del fin de semana después de su pequeña diferencia, y aunque una parte de si mismo le decía que quizá estaba exagerando y que solo estaba descargando sus emociones negativas en su hermana, una parte más grande permanecía molesta y no hacía más que recopilar pequeñas cosas que dieran validez a su empeño de no hablarle.

Primero, Dongsoon no lo tomaba en serio cuando Donghyuck se quejaba de tener que encontrarse a Mark en todo lados. Ni siquiera se había tomado en serio el estrés y la angustia que Donghyuck había pasado con el asunto del vídeo. Le había dicho exagerado, y no había validado sus sentimientos por más ridículos que fuesen.

Segundo, estaba seguro de que ella en verdad quería emparejarlo con Mark. No le creía nada de que habían sido casualidades enviarlo a cuidar a Jisung sin saber que Mark estaba en casa y luego llevarlo a comer con sus amigos donde claramente estaba incluido Mark. Y no, no, no, él no iba a satisfacer las fantasías fujoshis de su hermana, su vida no era un drama BL para el disfrute de los demás.

Tercero Bueno, no se le ocurrió un tercero, pero con las dos primeras era suficiente para no querer hablarle y ya.

Taeyong, siendo el hermano mayor comprensivo y pacifico y todo perfecto que era, obviamente intentó ser el mediador entre los dos, pero ni siquiera su charla motivacional e inspiradora de diez minutos sirvió para disuadir a Donghyuck. No iba a hablarle a Dongsoon hasta que ella se disculpara, no y no y no.

Honestamente Donghyuck pensaba que iba a tomar más tiempo conseguir tal disculpa, después de todo Dongsoon era igual de orgullosa que él, pero el día lunes cuando bajó a desayunar ya vestido y listo para la escuela, se encontró con su hermana en la cocina y con el desayuno listo sobre el mesón. Y no un desayuno cualquiera como cereal y leche, si no uno bien hecho; arroz al vapor, vegetales, bollos rellenos, huevos duros y sopa de algas.

—Nuestro cumpleaños no es hoy —murmuró mientras se sentaba en un banquillo, mirando de reojo a su hermana y luego a la olla en el medio del mesón con la sopa.

—Si, pero te encanta la sopa de algas. Y yo quiero disculparme. 

Donghyuck entrecerró los ojos, cruzandose de brazos y recargandose en el espaldar del banquillo.

—¿Por qué?

—¡Pues porque eres mi hermano! —Dongsoon chilló, subiendo y bajando los brazos de golpe. Donghyuck rodó los ojos—. No me gusta cuando no me hablas, Hyuck.

Se dice que le gustas ➳  MarkhyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora