Love with flaws; GoYuu.

14

—Wow -soltó Gojo sin más mientras caminaba por enfrente de la mesa de estar en la sala donde se encontraba su hermana estudiando sola sin ayuda. Eso le sorprendía de sobremanera.

—¿Que pasa? -preguntó confundido Geto que se encontraba sentado en el suelo tratando de ayudar a su hermanita.

—Me parece extraño verte estudiando sin tu tutor -soltó riendo alzándose de hombros mientras caminaba hacia la cocina.

Escucharon el timbre de casa sonar mientras que su hermana se levantaba del suelo sin importancia de dejar lo que estaba haciendo pronunciando que ella abriría.

Geto se levantó rápidamente del suelo mientras que Gojo salió corriendo de la cocina para seguirlos sin importarle lo que había dejado en el microondas.

Vieron de lejos la emoción en la expresión de su hermana menor al ver al chico frente a su puerta, notaron como se abrazaron tiernamente.

—Saldré con mi novio -contó de golpe la chica sonriéndole a sus hermanos mayores.

Gojo y Geto se voltearon a ver más que sorprendidos para quedarse allí mismo estáticos sin poder pronunciar palabra alguna mientras veían como su hermana se iba de allí.

Volvieron a lo que cada uno estaba haciendo después de regresar a sus sentidos.

—¿Entonces ahora tu también necesitarás un tutor? -preguntó Gojo mientras se sentaba en el sillón detrás de su hermano que se encontraba estudiando arduamente golpeando con su lápiz su cabeza sin poder comprender el tema que estaba leyendo que le habían encargado a su hermanita. Porque si, Geto había perdido una apuesta así que allí se encontraba ayudándole a Miwa mientras que ella salía a una cita con su novio.

—Miwa me dijo que el no se sentía bien como para venir hoy -contó el chico mientras dejaba caer su rostro de golpe en la mesa bufando. Estaba harto de no poder comprender ese tema estupido, tampoco entendía en qué le iba a servir entenderle más adelante a él si era clase de su hermana y no suya.

—¿No se sentía bien? -preguntó el castaño preocupándose rápidamente.

—También me pareció muy extraño ya que él nunca falta aunque se sienta mal, tampoco me quiso explicar más nada así que no le pregunté nada más respecto a eso -contó Geto para alzar su rostro de la mesa, tomó su vaso de agua para darle un enorme trago.

Gojo recostó su espalda en el respaldo del sillón para encender la televisión frente a él después de tomar el control remoto de la mesa a un lado de toda la porquería que su hermano se había comprado para consumir.

Geto se levantó del cojín donde estaba sentado para después tumbarse en el sillón junto a su hermano. Gojo lo miró confundido. —¿Acaso no seguirás estudiando lo de Miwa? -preguntó el chico con confusión y una pizca de diversión.

Geto lo tomó por el brazo y negó recostando su cabeza en el hombro de este. Gojo rió sin más para comenzar a buscar algo interesante para ver con su hermano. Cuando por fin decidieron que ver después de haberse negado a miles de cosas que habían elegido cada uno por separado tuvieron que ponerle pausa a la película ya que el timbre de casa comenzó a sonar. Geto bufó resignado cuando su hermano le ganó en él piedra papel o tijeras para ver quien debía de ir a abrir la puerta y fijarse de quien se trataba.

—¡Supiste de la tremenda noticia! -Todou entró sin saludar a la casa dejando al mayor estático. Cerró la puerta detrás de su mientras caminaba detrás de Todou que se dirigía a la sala.

—¿Cual noticia? -preguntó Geto mientras lo veía de espaldas. Este reverencio frente a un Gojo que había escondido su cabeza debajo de una almohada del sofá. En realidad no tenía ganas de conversar con el amigo molesto de su hermano. Preferiría que la tierra lo tragase antes de platicar con el, no porque no le agradará. Sino porque simplemente no se llevaban mucho además de que era incómodo conversar con el.