Voldemort apoyó el codo en el almohadón y la cabeza en la palma de la mano al escuchar a Potter moverse. Una sonrisa ladina se desplegó en sus labios. Llevaba esperando que se despertara casi una hora, había pensado en patearlo los últimos cinco minutos.
Potter se pasó una mano por los ojos, intentado quitarse la soñoliencia de encima. Intento abrir un ojo y gimió ante la luz del día. Claramente su dolor de cabeza era de la misma intensidad que la luz del sol ese día. ¿Por qué narices no cerró las cortinas anoche? pensó malhumorado. No es que fuera la primera vez que le sucedía. De hecho, ni siquiera recordaba como había llegado a casa. Sin duda... anoche se había pasado bebiendo. Afortunadamente mayo casi había terminado, las cosas mejorarían un poco en verano... al menos podría permitirse dejar de beber unos días. Tampoco es como si con esta reseca que tenía encima pudiese hacer mucho más. Si... tendría que ver si le quedaban pociones para la resaca e ir a comprar más.
Harry se atrevió a entre abrir los ojos, pero sin sus gafas todo estaba borroso. Intentó palparlas en la mesita de su cama pero se encontró con una pared y frunció el ceño. ¿Tan mal estuvo anoche para meterse en otra habitación? se preguntó confundido. No obstante, fue en ese momento que escuchó una risa a su lado. La piel se le puso de gallina y olvidando su resaca, su dolor de cabeza y la horrible luz que entraba por la ventana abrió los ojos de par en par. Rápidamente cogió las gafas que le tendía una mano. Cuando vio a un chico moreno de pelo ligeramente ondulado y con los ojos marrones mirándole su instinto se hizo cargo y retrocedió contra la pared, golpeándose la cabeza con ella y aumentando su dolor de cabeza ya de por sí intenso.
El otro chico simplemente se rió con más ganas, todavía en la misma posición.
-Después de lo que me hiciste anoche no estés tan sorprendido -dijo Marlo todavía con una sonrisa.
-¿Q-qué? ¿Anoche? ¿Q-qué pasó anoche? -preguntó mirándole.
Fue entonces cuando Harry se dio cuenta de que estaba desnudo, únicamente tenía puesto los boxer y pegó un grito, arrastrando la sábana para cubrirse la parte inferior de su cuerpo. No es como si en Hogwarts nadie le hubiese visto así pero despertar de repente con un extraño en un sitio extraño y desnudo, fue un shock.
-¿Qué me hiciste?
-Nada, en realidad me lo hiciste tu a mi.
-¿Yo?
Harry quería que fuera todo un sueño o en su caso desmayarse. Cualquier cosa era buena. Sentía la sangre circular por sus venas a una velocidad frenética. Era imposible que lo hubiese hecho con un hombre. No porque fuese un hombre, eso le era indiferente, pero siendo su primera vez con uno debería acordarse, hasta ahora nunca se había acostado con un desconocido y menos por estar ebrio. Realmente se había pasado anoche con la bebida.
Harry se pasó nervioso una mano por la cara. Sentía como le subía la bilis y temía vomitar, de hecho, era raro que no lo estuviese haciendo ya. El chico había dicho que se llamaba Marlo, al menos recordaba su nombre.
-Mira, Marlo, ¿verdad? -el chico asintió-. Lo siento, pero no recuerdo nada de anoche y si hice algo inadecuado... te compensaré de alguna forma.
La expresión de Marlo se puso seria.
-Bueno... es tarde para compensarme una vez ya me has vomitado encima, ¿no?
-¿Disculpa? -dijo Harry sorprendido.
Marlo sonrió ampliamente, ahora venía la parte divertida..
-Mi camiseta y medio baño. Todo sumamente desagradable. Por no hablar de la tortura que fue llevarte desde ese bar mugriento hasta mi casa.
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Extrañas coincidencias
FanficHarry no lo está haciendo demasiado bien después de la guerra. Le pesa demasiado la muerte de los que ya no están, como consecuencia ha adoptado malos hábitos. Por su parte, Voldemort, quien supuestamente murió el dos de mayo, no está tan muerto co...