What about the glasses? - KookTae ♡︎

O6

—¿Tienes planes para mañana?— Cuestionó Jeon desde el otro lado de la línea.

La última vez que se vieron fue el martes, ¡y Jungkook quería verlo de nuevo! Taehyung se encontraba más que feliz.

—Depende de la hora. Los viernes cerramos la clínca temprano, a las tres en punto. Papá es muy estricto con la puntualidad para todo.— Respondió el mayor soltando una ligera risa, correspondida por el azabache.

—En ese caso, señorito Kim Taehyung, ¿querría usted pasar tiempo de calidad con este humilde mortal, yendo a ver una película a las cinco?— Dijo adaptando un gracioso tono apuntando a ser serio, causando una estridente y armoníosa risa del otro lado.

—Por supuesto que quiero, señor Jeon Elegante Jungkook.— Siguó el rubio.

—Es de mi agrado informarle que es una estadía en el cine con todos los gastos pagados.

—Vaya, ¿eso implica si pido todo de la dulcería?— Quiso jugar un poco.

—Por supuesto, usted es más valioso que unos cuantos wons bien invertidos en su almentación.— Devolvió el otro, causando un ligero sonrojo en el mayor.

—Estamos concientes de que no es una buena, ¿verdad?

—No, pero si es de su agrado, ¿qué hay de malo en excederse un poco?

—Me parece que es usted todo un filósofo.

—Un filósofo que realmente quiere consentirle.— Musitó Jungkook bajando un poco la voz dándole más énfasis al sentimiento que quería transmitir. Hubo un pequeño silencio que al pricipio Jeon interpretó como que cometió un error al pronunciar eso, y estuvo a punto de mencionar algo más, pero la profunda voz de Kim le interrumpió.

—Entonces hágalo. Consiéntame para que me enamore de usted al punto de no querer dejarlo ir nunca más, ¿Eso suena como una propuesta atractiva para usted, señor Jeon?— Dijo el rubio, esperando fehacientemente a no recibir un rechazo.

—Es la propuesta más atractiva que he recibido en toda mi vida, señor Kim. Así que si me permite deberé colgar, pues necesito buscar el atuendo adecuado para no lucir como un tonto fuera de lugar al lado de semejante belleza como la que usted posee.— Mencionó Jungkook, no hace falta decir que causó otro rubor enorme en las mejilas contrarias.

—Jamás lucirás como un tonto para mí, para mí posees un atractivo mayor al de todos los hombres que he podido conocer.— Afirmó el rubio con total seguridad.

—¡Hyung! Se supone que el romántico estaba siendo yo.— Reclamó Jeon con un tono infantil.— Pero dime una cosa, ¿soy incluso más guapo que Jimin y Yoongi?— Cuestionó.

—Incluso más que ellos dos juntos.— Aseguró.— Pero no se los digas, dejarán de hablarme por días.— Pidió el mayor riendo y causando la risa contraria.— Ahora si es hora de despedirnos, están apunto de dar las nueve y necesito dormir.— Y sí era tarde, y sí necesitaba madrugar, pero la verdadera razón por la que deseaba colgar era para gritar como un loco ante la emoción y la alegría que estaba sintiendo en ese momento, y porque también quería preparar algo lindo para usar al día siguiente.

—Claro, descansa, lindo Taehyungie.— Dijo el azabache.

—Descansa, lindo Jungkookie.

Y así finalizó su llamada, ambos demasiado emocionados como para dormir, gritando sobre sus almohadas y corriendo a buscar algún atuendo que seguramente le agradaría al contrario.  

...

La tarde del viernes llegó demasiado rápido para los pobres corazones agitados de los dos enamoradizos, y ahora Kim se encontraba camino al cine acordado.