El Reencuentro ✔️ [YA EN FISICO]

9: ¿Loren Enamorada?

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¿Loren enamorada?

Loren

Decidimos salir de compras hoy y de paso dar una vuelta, Alejandra quería mostrarme un poco su ciudad. Normalmente en los ángeles íbamos en bicicleta o en metro a todos lados cuando no teníamos nada que hacer, pero hoy por obligación tuvimos que caminar en plena mañana calurosa.

Entramos a un bonito almacén de ropa interior y trajes de baño, me gustan mucho los colores vivos cuando de ropa interior se trata, le modelo unos cuantos a mi mejor amiga mientras la veo tensarse un poco.

— ¿Todo bien?

Ella asiente.

—Debo ir al baño, no me tardo.

Después de largos quince minutos sigo mirándome en el espejo esperando a mi mejor amiga.

Le sugerí a Alejandra comprar un par de trajes de baño y ropa interior solo por si las moscas y asintió dudosa pero logre convencerla. Y la entiendo yo también he tenido tan malas experiencias con mi ropa interior.

Continuo durante un rato dándole una vuelta al almacén, veo que las chicas miran hacia un punto exacto. Oh ya entiendo, es raro ver a un hombre en una tienda de ropa interior de mujer.

Visualizo a un hombre alto y apuesto. ¡Muy apuesto! Dios mío.

Veo como mira las tallas de los brasier, me rio un poco quizás le está comprando ropa interior a su novia. Quizás no sea para su novia, además también puede ser para su mama o su hermana. Cuando lo veo mejor se me prende el foco.

Pero si yo conozco a ese hombre.

Ángel Rodríguez.

Lo he visto en varias entrevistas junto a Juan José López, y siendo completamente sincera, tengo un crush por el desde que comencé en el maquillaje y moda.

Loren modo seductora activado.

Me acerco lentamente mientras acomodo mi cabello, mientras más me acerco mejor puedo verlo tiene un cuerpo para morirse, desde su polo amarillo pueden verse sus brazos bien marcados, su barba bien arreglada, y tiene un perfil perfecto.

Mis ojos se topan con los suyos, y siento instantáneamente como mi cuerpo empieza a vibrar. Se ve mil veces más guapo que en las fotos y entrevistas que vi.

—Hola—su voz sale áspera y seria—. Disculpa, es que buscaba ropa interior para mi hermana menor tiene diecisiete años ¿Crees que este le quede?

Me muestra un conjunto naranjado completo. Parpadeo varias veces.

—Hola y no—niego con la cabeza—. ¿Sabes más o menos su talla?

El parpadea confundido y luego frunce las cejas mirándome de arriba abajo.

—Es baja y de cuerpo curvilíneo—Me sonríe y sus perfectos dientes adornaron esos labios tan provocativos.

—Okey—me mira sin molestarse en esquivarme—. ¿Sabes qué color le gusta?

¿Está coqueteándome? Imposible.

—Azul marino sin duda.

—Vale, le diré a la chica que nos muestre todo lo azul que tenga—deja de mirarme para enfocarse en la mujer que atiende.

Y así duramos varios minutos. El viendo y opinando colores mientras que yo le explicaba cómo quedaría el bikini puesto en su hermana y las formas que la harían ver bastante atractiva.

Termine comprando incluso un par de ese color Cuándo me medí la ropa interior estaba por salir a mostrarle a ángel pero caí en cuenta de que no puedo ser más estúpida casi salgo semi-desnuda a mostrarle a él.

Tonta. Tonta. Tonta.

Medio me asomo por la cortina de los probadores y lo llame:

—Oye—él se asomó un poco y me sonrió. Le sonreí de vuelta.

—Tranquila no me muestres, simplemente dime como se ve en ti—dice y sonrio para mis adentros.

Y realmente yo no tengo ningún problema en enseñarle lo claramente bien que me veo en ropa interior.

—Puedes entrar.

Él lo hizo. Pero al parecer no era consciente de lo que pasaba por que cuando me vio se quedó estático.

—Yo...—mira hacia la pared—. Ese esta perfecto, se lo pediré en una talla más grande a la mujer del mostrador, gracias

Y salió como fugitivo del vestidor.

Mierda.

Me visto con lentitud, no quiero encontrármelo afuera, ya suficiente tengo con esto que acaba de pasar, no pensé que fuera a reaccionar tan incomodo, ósea si entiendo pero ¿Esperaba que simplemente le dijera que se veía bien?

Salgo y me lo encuentro fuera de la tienda.

— ¿Siempre eres así?—es lo primero que dice cuando sus ojos se encuentran con los míos.

Lo miro confundida.

— ¿Así como?—Él se acomoda el cuello de su polo amarillo y sonríe.

—Gracias por tu ayuda Señorita. Sé que a mi hermana le encantara—me mira de nuevo pero yo debo alzar mi cabeza para mirarlo bien—. Así de coqueta y sin vergüenza.

—No conozco la vergüenza realmente.

El respiro profundo.

—Te he visto en algún lugar—dice—. Pero no recuerdo donde.

—Yo sé se quién eres. Me llamo Loren Salinas.

—¿Nos conocemos?

—Eres Angel Rodríguez—suspiro—. La mano derecha del próximo heredero de los López.

—Me conoces. Pero aún no logro saber quién eres tú.

—No me conoces, es la primera vez que nos vemos—le aseguro.

Lo cual es cierto, es la primera vez que nos vemos. Nos miramos por un rato mas y finalmente el habla:

—Gracias, un placer señorita Loren.'

—Igualmente.

Y cada quien toma su camino.