Capítulo 33 - WangXiao

198 37 49
                                    

Después de despedirse de sus madres ambos chicos empezaron a caminar. Xiao Zhan seguía mirando a Yibo con mucha intriga— No lo estoy imaginando... ¿Verdad? Hoy Yibo está raro... ¿Qué estará tramando? —pero de pronto sus ojos se posaron en la canasta que el chico llevaba— ¡BoDi! ¡BoDi! ¿Qué traes allí? —dijo acercándose un poco más mientras señalaba la canasta.

Yibo al sentir a Xiao Zhan tan cerca dio un paso alejándose— E-E-Es comida... mamá creía que sería buena idea que tuviéramos algo para comer...

— Oh... por cierto ¿a dónde vamos?

— Mm... no tiene un nombre en específico, pero yo le digo la colina.

— Oh... ¿La colina? —Xiao Zhan murmuró bajo mientras caminaba— ¿Queda lejos?

— Solo un poco.

Después de 10 minutos caminando, Xiao Zhan veía que aún no había indicio de llegar a algún lado.

— BoDi ¿Ya casi llegamos?

— Sí, ya casi.

5 minutos después.

— BoDi ¿aún falta?

— Sí, sí, ya estamos llegando.

5 minutos más.

— BoDi.

— Ya casi.

Pero pasado algunos minutos más el mayor volvió a hablar.

— BoDi, llevamos mucho tiempo caminando... ¿Seguro que ya casi llegamos?

— Que sí ¿Ya estás cansado? Eres muy flojo.

— ¡No soy flojo! Es que, de verdad siento que no vamos a ningún lado y hemos camino por todo el pueblo.

Yibo hizo una mueca mirándolo— Si te digo que vamos a algún lado es que de verdad vamos, no salgo por salir.

— Ayer igual caminamos mucho y no fuimos a ningún lado.

— ¡Ayer era diferente! Tenía que sacarte de la casa de alguna manera para que el resto decorara...

Xiao Zhan al escucharlo colocó un puchero en sus labios e infló levemente sus mejillas— Yo pensaba que querías estar conmigo.

— ¡¿Ah?! —Las mejillas de Yibo enseguida se colocaron levemente rojas mirando el adorable rostro de Xiao Zhan— ¡T-También! Y-Yo quería también, pero también tenía que... ¡Ah! ¡N-No te enojes!

Xiao Zhan soltó una risa y con su hombro le dio un empujón— Tonto ¿cómo por qué tendría que enojarme? Tonto~ Tonto Bo~

El joven Xiao empujó un poco el sombrero de Yibo haciendo que se desacomodara.

— ¡Oye! —después de acomodar nuevamente su sombrero trató de darle un golpe en el brazo de Xiao Zhan, pero este lo esquivó.

Enseguida el par de chicos empezaron a perseguirse mientras reían y se daban pequeños golpes.

Entre juego y juego el par llegó a la terminal de buses de Lacock, Xiao Zhan abrió grande los ojos deteniéndose— Yibo ¿a dónde vamos? ¿Tomaremos un bus? —dijo con intriga. Yibo no paró de caminar por lo que el joven Xiao corrió para alcanzarlo.

— Claro que no, pero es por acá cerca —Yibo volvía a sentir al chico bastante pegado a su cuerpo, movió levemente su cabeza mirándolo de reojo.

— ¡Llevas diciendo eso hace rato! Y-y nada... —Xiao Zhan miraba a su alrededor intentando de no chocar.

Yibo notó lo nervioso que se encontraba el joven Xiao. Miraba a las personas que pasaban a su lado, sus ojos se movían muy rápido de un lado a otro. Xiao Zhan estaba encogido de hombros mientras caminaba enseguida disculpándose si rozaba su hombro con alguien más— Dios... desde afuera no se veía tan lleno... hay muchas personas ¡N-no sabía que el domingo muchas personas viajaban!... apenas y se puede caminar... —movía rápido sus pies casi que trotando detrás del chico— No te pierdas... No te pierdas —trataba de caminar cerca de Yibo, sin embargo, sentía que por los empujones se alejaba de a poco— Y...Yibo... Espera —murmuró; temerosos pensamientos inundaban su cabeza, terribles recuerdos de las veces que se perdía cuando salía con sus padres en China que terminaban en un pequeño Xiao Zhan empapado en llanto.

[1937 | Un Viejo Amor]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora