14; La llegada de Cassie y el concepto de felicidad.

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A medida que Harry crecía, con cada año que cumplía y con cada experiencia que adquiría, se preguntaba si sería capaz de ser una persona, un adulto responsable. Después de cada desilusión amorosa, se preguntaba si lograría encontrar finalmente al amor de su vida y ser feliz a su lado, se preguntaba constantemente por ello. Después de cada equivocación, de cada caída, de cada rechazo...

Pero entonces, cuando Harry estaba en un momento tan extraño de su vida, donde ya no buscaba nada, donde no quería nada, lo conoció: conoció a Louis. Para él fue amor a primera vista, Harry quedó totalmente enamorado de esos hermosos ojos azules y esa sonrisa sarcástica. Y cuando Louis lo mandó al diablo cuando le invitó un trago, supo que lo quería en su vida.

Y así fue, aun después de varios años juntos, una boda, un hijo y otro en camino, Harry finalmente tenía a Louis en su vida. Y se sentía maravilloso, se sentía espectacular despertar junto al amor de su vida cada día, verlo crecer, volverse un padre amoroso y un trabajador inigualable. Amaba cada momento que ha vivido junto a Louis, junto a Keith y prontamente junto a su pequeña niña; Cassie.

Casi parecía irreal el hecho de que tendrían otro bebé pronto, que podrían volver a sentir la emoción y los nervios de ser padres nuevamente. Si Harry era sincero, extrañaba el tener un bebé por casa, el sentir bajo sus manos el vientre terso y abultado de su esposo. Keith estaba bastante grande ahora, así que en realidad era un muy buen momento para tener a otro integrante en la familia.

Habían decidido llamarla Cassie porque el nombre era simplemente espectacular para ellos, a Keith le gustaba y Louis parecía ilusionado sobre ello, así que lo decidieron una madrugada mientras Louis comía helado y Harry intentaba mantenerse despierto.

Ahora, ahora solo faltaban unos pocos días para que su niña llegase al mundo, ya tenían todo listo, la habitación, la ropa, los juguetes y sobre todo, las ansias. Louis definitivamente parecía menos nervioso que la primera vez, ahora se veía confiado y un poco desesperado para que Cassie ya saliera, Harry lo entiende, debe ser difícil el llevar todo el tiempo un bebé en tu vientre.

Así que la noche antes de tener que ir al hospital, Harry y Louis revisan la maleta de la bebé, asegurándose de llevar todo lo necesario. Johanna y Anne habían llegado hace tres días atrás para estar presentes en las primeras horas de su nieta, además para cuidar a Keith mientras ellos estuvieran en el hospital. Había sido todo diferente esta vez, todas sus familias estaban involucradas en el embarazo y les habían llenado de regalos para la niña y sobre todo para Keith.

Fue el día jueves, doce de octubre, a las doce treinta y cinco de la tarde, cuando Cassie Styles Tomlinson vino al mundo.

Llegó lanzando patadas y gritos a todo pulmón. Harry lloró desde el primer momento y Louis lo hizo también, en cuanto escuchó el llanto de su pequeña y simplemente se enamoró cuando la pusieron sobre su pecho. Harry había recostado su cabeza sobre el hombro sudoroso de Louis y había besado la pequeña cabecita de su niña, sintiéndose el hombre más feliz y sobre todo, completo del mundo.

Que Keith conociera a Cassie fue otra gran experiencia, el pequeño estaba rebozando de emoción y nervios, había querido ir de inmediato al hospital cuando sus abuelas le habían avisado que su hermanita ya había nacido, pero tuvieron que decirle que tanto ella como papá necesitaban descansar.

Louis tenía las emociones y las hormonas totalmente descontroladas y lloró en cuanto vio a su pequeño venir hacia él sosteniendo unos globos y dos pequeñas bolsas de regalo. Lo abrazó fuertemente y beso su frente, impregnándose de su aroma.

—¿Dónde está mi hermanita papi? —Le preguntó sonriendo—ya quiero verla.

—La llevaron a hacer unos análisis—explicó Louis sintiéndose feliz de estar con su pequeño nuevamente —pero la traerán pronto para que la conozcas.

—Estoy muy feliz papi—dice Keith recostando su cabecita en el pecho de su papá—voy a ser el mejor hermano mayor.

—Estoy muy seguro de que así será amor, vas a ser el mejor hermano mayor de todo el mundo.

—¿Mundial? —Pregunta el pequeño, con emoción.

—Así es cariño—sonríe Louis —el mejor hermano mayor del mundo mundial.

Trajeron a Cassie diez minutos después de la llegada de Keith, el pequeño estaba rebotando de alegría y cuando Louis lo ayudo a sentarse y puso a su hermanita sobre sus brazos, comenzó a llorar.

—Te amo mucho Cassie—Dice Keith, entre lágrimas, viendo a su hermanita

—Oh amor—Contesta Louis, soltando a llorar también.

Harry observa a su familia, a su esposo y a sus hijos, y no puede creer lo afortunado que es, lo mucho que ha logrado y lo feliz que se encuentra. Eso, es casi un recordatorio de lo afortunado que es, de tener a Louis a su lado, a sus hijos, de tener salud, trabajo y sobre todo, el ser feliz. Harry es muy afortunado de ser feliz, de tener una familia y amor rodeándole siempre.

Y estará toda la vida, agradecido por ello. 








[* * * * *]

Lamento mucho la demora amores, pero espero que les guste el capítulo. 

Las amo <3 

Javs

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