Jaehyun no recordaba haber experimentado tanta ansiedad en algún momento de su vida.
Su pequeño bebé llevaba al menos una hora encerrado en el baño de su habitación devolviendo el estómago.
Había ido a la habitación de su empleado a pedirle ayuda y, apenas el joven escuchó lo que sucedía, entró nuevamente a su cuarto para salir con una bolsa entre sus manos antes de correr donde el chico.
Desde ese momento, el mayor no sabía lo que estaba ocurriendo ahí dentro.
- ¿Crees que le haya caído mal la comida? – preguntó a Jeno.
- Obviamente – respondió distraído – le dije que no comiera eso –
- ¿Y qué si tenemos que llevarlo al hospital? – comenzó a morder sus uñas – mi pobre bebé –
- No será necesario – guardó su teléfono – Jungwoo puede controlarlo –
- Jeno – llamó el mencionado, saliendo del baño - ¿puedes traer un poco de agua para tu hermano? –
- Yo intenté advertirles –
- Estoy seguro de que sí – sonrió – pero sigues castigado –
- Como sea – murmuró, saliendo de la habitación.
Jaehyun miró a su empleado, cuyos ojos escupían dagas en su dirección.
- ¿Qué fue lo que comió? – preguntó lo más tranquilo que pudo.
- Una pizza de salmón individual, dedos de queso, y un pastelito de chocolate – trató de hacer memoria – bebió algunas dos copas de vino –
- Señor Jung – llamó por lo bajo – se lo dije esta mañana...-
- ¿Cómo se suponía que supiera? No es normal que un chico de su edad se enferme por interrumpir una dieta deportiva –
- Jisung no está en una dieta deportiva – reclamó exasperado – Jisung está en una dieta blanda por su enfermedad –
- ¿Qué? –
- Su hijo tiene problemas estomacales por todas las porquerías que comía a escondidas – suspiró, intentando tranquilizarse – tuvimos que llevarlo al hospital. Tenía que seguir la dieta por una semana más antes de los nuevos estudios. No debía de comer nada de eso –
El abatido padre se sentó en la cama y apoyó su cabeza en sus manos.
- ¿Qué sucederá? –
- Probablemente tengamos que iniciar la dieta de nuevo – se colocó de cuclillas frente a él – está bien, no es su culpa que Jisung se comportara como lo hizo –
- Pero soy su papá. Yo debería haber dicho que no –
- Señor Jung, todo va a salir bien – sonrió a medias – le daré una hoja con los alimentos permitidos y todas sus alergias –
- ¿Tiene alergias? – lo miró asustado.
- También Jeno – hizo una mueca – tal vez no debería intentar alimentarlos – bromeó.
- Jungwoo – lloriqueó - ¿qué voy a hacer con mis hijos? –
- No se presione, puede intentar aprender más sobre ellos poco a poco – se levantó de su lugar – como cuando entrena antes de la temporada –
El rostro de Jaehyun se iluminó con una idea.
- Eso es – se levantó para tomarlo por los hombros – tú puedes ayudarme –
- ¿Qué? – rió – solo bromeaba, señor –
- Tú puedes entrenarme para cuidar a mis hijos –
- Paso – negó – si lo hago, me quedaré sin empleo –
- No lo harás – prometió – yo no estaré cerca todo el tiempo. Eventualmente tengo que volver a trabajar –
Jungwoo entornó los ojos y suspiró pesado.
- Bien, pero sepa que lo estoy haciendo por los niños –
- Gracias –
- Jungwoo – llamó Jeno, entrando en la habitación – el agua –
- Gracias, puedes ir a dormir –
- En un momento, necesito hablar con mi papá –
- Los dejaré solos – asintió, caminando al baño nuevamente.
Jaehyun lo miró expectante.
- ¿Qué sucede? –
- Sé que la paternidad no es lo tuyo. Simplemente no espero nada de ti –
- Jeno... -
- Pero Jungwoo ha estado incluso cuando le dimos lo peor de nosotros – apretó los labios – por favor, no hagas que se vaya –
- No lo haré –
- Entonces nos entendimos – caminó hacia la puerta – hasta mañana –
- Hasta mañana – susurró viéndolo salir.
Él no haría que Jungwoo se fuera.
Incluso si pensaba que estaba ocupando su lugar en la vida de sus hijos.
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The trainer
FanfictionJung Jaehyun era el reconocido entrenador para un equipo de baloncesto de primera división. Todos lo amaban. Excepto en el único lugar en que debían amarlo. Ahora, había vuelto, y lo hacía para quedarse. El problema era que había otro hombre int...