Al día siguiente Ragnar fue al hospital como de costumbre a visitar a su madre temprano en la mañana.
-¿Y ahora? ¿Qué fue lo que te pasó hijo? Te ves muy lastimado- dice Britta al ver a su hijo bastante golpeado y con moretones.
-Bueno... Conocí a alguien... Alguien que desearía no haber conocido- responde Ragnar entre risas con algo de cinismo y sarcasmo.
-Eso puedo notarlo- responde la madre observándolo de pies a cabeza -¿Y bien? ¿Quién hizo que terminarás así?- agrega.
-Bueno, de hecho no fue ella quien me dejó así, sino su guardaespaldas- dice el joven de la manera más casual posible.
-¿Ella?... Espera ¿Guardaespaldas? ¿Con quién demonios te metiste?- dice la mujer con una gran expresión de sorpresa.
-Una malcriada y mimada niña rusa y millonaria, de unos dieciséis o diecisiete que, resulta es mi media hermana- dice el chico con un tono sarcástico mientras recoge su largo cabello -Al parecer el viejo Søren ahora es millonario y su nueva esposa también... ¡Agh! Ni siquiera tras veinte años deja de ser una maldita molestia- agrega un poco exaltado.
-¿Sabes hijo? Yo también conocí a alguien- dice la madre observando a su hijo.
-¿Ah sí? ¿Y quién es? ¿Qué clase de persona es?- dice Ragnar intrigado.
-Es una chica joven y bella, es asiática y es muy buena persona, aún a pesar de todo lo que le pasó, siempre que la veo lleva una sonrisa... Vamos, quiero que la conozcas, sé que te va a agradar- dice Britta mientras se va de la habitación llevando consigo a Ragnar.
-¡Está bien! Si tú lo dices mamá- dice el joven mientras acompaña a su madre.
Tras esto, ambos se dirigieron a otro cuarto no muy alejado del cuarto de Britta, al llegar allí Ragnar no puede evitar que su mirada se quede fija en la chica de cabello largo y liso a la vez que sedoso y de ojos oscuros que se hallaba en aquel cuarto, a lo que su madre le habla alegremente a la chica.
-¡Malai! ¿Qué tal estás hoy?- dice Britta enérgica y alegre.
-¡Ah! Señora Britta, mucho mejor, aunque las heridas aún duelen... ¿Cómo se encuentra usted?- responde Malai tras escuchar a la madre de Ragnar.
-Me alegra escucharlo... La verdad, hoy me siento bastante enérgica- dice la mujer entre risas.
-Es bueno verla así... Y... ¿Quién es el chico que la acompaña?- dice la chica intrigada.
-¡Ah! Este es mi hijo, Ragnar- dice la madre observando a su hijo -Vamos hijo, sé que es muy linda, pero no te quedes ahí como idiotizado, saluda- agrega entre risas.
-¡Ah, sí!, Perdón... M...Mucho gusto... Soy Ragnar Sørensen- dice el chico notoriamente nervioso.
-Mucho gusto Ragnar, yo soy Malai Chaikla- responde la chica sonriendo -La verdad, sí está guapo su hijo señora Britta- agrega entre risas, a lo que Ragnar vuelve la mirada hacia otro lugar.
-Regreso en un momento- dice Ragnar para inmediatamente salir de la habitación
-Y pensar que lograste que mi hijo se pusiera todo colorado... Me impresionas- dice Britta entre risas -Él no es muy abierto con los demás últimamente, pero creo que lograste entrar en ese corazón de hielo- agrega.
-¡¿De verdad?!- dice la chica sorprendida -La verdad parece todo lo contrario, como si pudiera abrirse a los demás con mucha facilidad- agrega
-Pues, la verdad es la primera vez en mucho tiempo que lo veo así- dice la madre pensativa -Ha pasado por mucho desde muy pequeño- agrega a lo que la chica simplemente se quedó pensativa.
Tras esto, el chico regresó a la habitación con bebidas para su madre y Malai, además de para él, a lo que la chica lo observa y mientras este les entrega las bebidas la chica le habla.
-¿Y bien? ¿A qué te dedicas Ragnar?- pregunta la chica llena de curiosidad.
-La verdad, he hecho muchas cosas en la vida, pero ahora, estoy en la universidad y hasta hace poco era parte de una banda, además de que estuve un tiempo en el ejército, no fue fácil para mí el tener que cortar mi cabello- dice el chico entre risas.
-¿Tú llevaste cabello corto hace poco? No te creo- dice la chica riendo.
-Aunque no lo creas, es la verdad, mira- dice el joven para luego mostrarle una foto a la chica que al verla no puede evitar reírse a la vez que sentirse sorprendida.
-Te lo dije- dice Ragnar riendo.
-Ustedes dos se llevan bastante bien, incluso parece como si se conocieran de hace tiempo- dice la madre entre risas -¿Para cuando la boda?- agrega entre risas.
-¡¿B...Boda?!- dice la chica sonrojada.
-Exacto mamá... ¿Cómo que boda?... Primero tengo que pedirle que sea mi novia- dice el chico para luego avergonzado percatarse de lo que había dicho mientras Malai lo observaba sonrojada y su madre aguantaba la carcajada.
-Ya hablando enserio, ustedes dos hacen bonita pareja, deberían conocerse más... ¿Quién dice que no puede pasar que Malai termine llamándome suegra?- dice Britta casi riendo, mientras que Ragnar y Malai estaban cada vez más rojos.
Tras esto y luego de un rato, Ragnar salió del hospital de regreso a casa, para encontrarse en el camino a Katya su media hermana, este al verla intenta evitarla pero le resulta inútil puesto que la chica en cuanto lo vio se dirigió hacia él.
-*suspiro*... ¿Y bien? ¿Qué quieres de mí ahora?- dice Ragnar con un claro desdén hacia su media hermana.
-¿Eso es lo primero que dices al ver a tu media hermana?- dice la chica de manera arrogante.
-¿Viniste a mostrarme tu vanidad y tu arrogancia?- pregunta el chico indiferente -Mira, en serio no me interesa nada que tenga que ver con Søren, así que si es por eso por lo que viniste bien conoces el camino de regreso- agrega.
-No entiendo porqué lo odias tanto, si él es tan buena persona- dice la chica intrigada y confundida.
-Pregúntame lo mismo cuando tu madre enferme gravemente y él decida dejarlos por hacer dinero- dice Ragnar para luego seguir su camino a casa.
-Blyat... ¿Cuál es su problema?- dice Katya mientras ve como Ragnar se aleja.
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Rise Of The Dark Phoenix
Science FictionRagnar Sørensen no ha tenido una vida fácil desde que su padre se divorció de su madre y los dejó a su suerte, aún así han estado bien hasta ahora. Sin embargo, desde que comienza la universidad vivirá varios sucesos que le cambiarán la vida por com...