Capítulo 4

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⚠️ADVERTENCIA⚠️

En este capítulo se hace mención a los ataques de pánico y se menciona un medicamento, si sufres de este mal no pienses en ingerir la medicina que mencionó sin antes acudir a un médico profesional.



Naya observo con recelo su patineta, desde que se había caído no había vuelto a montar en ella, todavía le dolían sus manos al recordar el golpe que se dio. Jacob por supuesto se enteró de lo sucedido y la molesto por días. Ahora tenía que pensar muy bien, si estaba dispuesta a caminar o probar su suerte con la patineta de nuevo.

Al final opto por la opción más peligrosa según su criterio y se fue patinando, esta vez con mucho más cuidado a casa de su amiga, Naya le había pedido los apuntes a una compañera para estudiar y ella había aceptado, iba en camino a recogerlos.

El viaje fue mucho mejor de lo que esperaba y llego con más rapidez, con la confianza restaurada regreso a la reserva, al llegar a su casa se encontró con Jacob en la entrada al lado de su carro y como siempre con una enorme sonrisa en su rostro bronceado. Esa misma mañana su primo había terminado de restaurar su Volkswagen Golf.

Naya dejo la patineta en la entrada, cuando Jacob la vio le dio una mirada burlona viendo su medio de transporte, el plan para comprar un auto para Naya término de la peor forma, como Jacob estaba muy ocupado reparando las motos de Bella no tenía tiempo para reparar el futuro auto de Naya así que como disculpa le enseño a manejar, prometiendo que en cuanto fuera buena conduciendo comprarían el auto.

Pero resulto que Naya era malísima en la conducción, tardo más de cinco días en poder avanzar por más de 100 metros sin ir frenando e incluso tuvo un accidente con un árbol que salió de la nada causando un pequeño choque y que la luz del frente quedara hecha añicos. Billy le prohibió conducir hasta que tuviera la edad legal y tomara clases con un instructor.

Naya acepto esto con facilidad, la idea de tener un auto propio ya no le parecía tan atractiva, lo único malo es que tuvo que viajar a pie siempre que quería salir, Jacob no se había enojado por su faro, pero como siempre estaba con Bella y era difícil que fuera su conductor.

Naya saco la lengua ante el gesto burlón, entro a la casa y sus fosas nasales olieron pizza, tomo una rebanada de la cocina y comió feliz, estaba tomando su segunda rebanada cuando Jacob entro.

—¡Hey! ¿Galleta quieres venir al cine conmigo y Bella? —le pregunto Jacob mientras tomaba una rebanada para él.

Naya sonrió brevemente por el apodo, a decir verdad le hubiera gustado ir, pero luego pensó en Bella y su gesto cambio.

—Tres son multitud.

—No solo seremos ella y yo, invito a sus amigos—. Le explico Jacob

La idea sonó aún más atractiva, le gustaba conocer gente nueva, pero luego lo pensó mejor, si irían los amigos de Bella probablemente iría el molesto Mike Newton y de todas maneras necesitaba estudiar

—Agradezco la oferta, pero tengo que estudiar— contesto Naya con sinceridad.

Jacob asintió mientras tomaba una rebanada, antes de irse le informo a Naya que Billy estaba con Sam, los dos pusieron una mueca ante esto, Naya al escuchar el nombre y Jacob al decirlo, le agradeció mientras iba a su cuarto llevándose otra rebanada.

Como prometió paso el resto del día estudiando, hablo por teléfono un rato con Seth que también estaba estudiando, él le ayudo con física y Naya le ayudo con geografía, cuando colgó no había pasado mucho tiempo y ya estaba harta.

Le costaba mucho aprender todo lo que necesitaba y aún más poner atención, las únicas materias en las que era buena eran Geografía y e Historia solo porque realmente le gustaban esos temas, no entendía para que necesitaba aprenderse todos esas fórmulas de Física «Para no reprobar» le respondió una voz burlona en su mente.

Enamorada de el Vampiro | Alice CullenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora