Tabú

8._Accidente

Los artistas con los artistas, pero los humanos con los humanos y los antropomorfos con los antropomorfos. No habían mesas designadas. Era como un habito adquirido. Todos iban a sentarse con su especie sin intención alguna de querer romper con ese orden implícito.

Mary miró las mesas y todas estaban repletas. El ambiente era agradable. Todos charlaban, bromeaban, reían animadamente mientras disfrutaban de las buena comida. Al fin decidió sentarse en el extremo de una de las mesas de los namekianos, que contaban con varios puestos libres, pues ellos no comían como los demás y también la gran mayoría estaban trabajando. La muchacha se ganó unas miradas de extrañeza de parte de varios, pero ni atención les puso. Tenía hambre y quería comer un poco.

-Hola- les dijo a los namekianos en la mesa, cuando notó que la veían.   

-Hola- le contestó la mayoría y siguieron con lo suyo.

Kalika estaba sentada frente a Bills, pero miraba a Mary como recordando algo muy remoto.

-Si no le quitas los ojos de encima voy a empezar a creer que te gusta.

Kalika miró a Bills como si apenas hubiera notado que estaba ahí.  

-Hoy es su debut. Me preguntaba si estará nerviosa. Yo lo estaba la primera vez que sali al escenario a caminar por la cuerda...

Bills la escucho, pero no hizo comentario. De reojo miró a Mary y volvió su atención a la comida, para decir en un tono casi antipático:

-Concéntrate en lo tuyo.    

No hubo ningún diálogo después de eso. La comida terminó y todos volvieron al asunto principal de esa noche: la función. Pronto el lugar se repleto de llamativos atuendos. Algunos muy diferentes a los de la caravana, como era el caso de Mary. Claro que el de ella, no estaba tan decorado como otros, pues le hubiera resultado un estorbo para su disciplina. Unas mayas blancas, con decoraciones de cristales y un maquillaje extravagante en que también se incluían algunos cristales, componían la vestimenta de la muchacha, que por primera vez estaban tras bambalinas. Desde allí, tras la cortina, pudo ver los espectáculos. Se había abstenido de eso para no caer en uno de sus malos hábitos.

El show iniciaba con las bailarinas y los acróbatas sobre unos hermosos caballos. Todo era una mezcla homogénea de danza, listones coloridos al viento más piruetas ágiles que daban, gracias a la luminosidad, la ilusión de ocurrir en el aire. Después venia un espectáculo de cortorcionismo donde esas máscaras, delante y detrás de la cabeza, hacían muy difícil saber en que dirección estaban las chicas realmente. Ambas terminabanetidas en una pequeña caja de cristal,que era levantada por un hombre enorme, con una piel verde atada a la cintura. Estramboticos payasos salían después de eso, vistiendo ropas como del siglo dieciocho. Una mezcla entre lo gótico y un desfile de carnaval caótico, donde toda clase de bromas y trucos de magia podían ocurrir. Después entraba el mago a poner orden a los ladrones de sus hechizos y expulsarlos de la pista. Entonces todo se ensombrecia y una oscura música egipcia sonaba silenciando al público,
dando paso a un espectáculo de ilusionismo ultraterreno.        

Bills entraba con una pantera sujeta por una cadena muy delgada. Con ayuda de ese feroz animal,se deshacía de los payasos,pero cuando todo quedaba en silencio,el animal escapaba y corría,feroz,hacia el público convirtiendose en Kalika, justo antes de alcanzar la galería. El miedo se volvía asombro y el primer aplauso solemne, se escuchó en la pista. Era un truco de presentación. Algo que sólo podía hacer una vez en cada ciudad o perdía impacto. No así los demás.  
       
Desde detrás de la cortina, Mary observaba con interés todo lo que sucedía en la pista. Pocas cosas la estimulaban tanto como era descubrir como funcionaban las cosas. Un truco de magia era algo que debía desentrañar a toda costa. Pero en ese momento se olvido de sus aficiones para dejarse encantar por el show. Ver a Kalika flotar al interior de una burbuja de jabón y al terminar, mirar como ambos desaparecían en una explosión de pétalos sin dejar más huella de su paso par la pista. Justo después de Bills, entraba ella por lo que encontrarse fue inevitable.