• C A P Í T U L O • S E I S • S2

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Narra Número Ocho:

Luego de que el raro, mal llamado "Elliot" despertará, nos dio un pedazo de periódico, diciendo que se parecía al viajero Número Cuatro. Nos dimos cuenta de que la foto de la persona en ese trozo de papel rasgado y viejo era Diego, nuestro querido y amado hermano.

— Cinco, en serio aprecio todo esto, de volvernos a encontrar pero debo volver —Giré mi cabeza levemente hacia el lado izquierdo y allí se encontraba el azabache mirándome con sus bellos ojos verdes. Frunció el ceño.

Estábamos en una mini sala de espera, en un loquero haciendo tiempo hasta que el maniático de mi hermano llegue.

— ¿Volver, a donde? —Preguntó confundido.

— Con Allison, Cinco. No le he dicho que estoy contigo, ni siquiera sabe que mierda hago todas las mañanas —Fruncí el ceño de igual forma.

— Por Dios, _____ ya eres una adulta, deberías comportarte como una —Miró al frente al escuchar la puerta abrirse.

Por ahí entraba un raro y confundido hermano, número dos. A simple vista parecía otra persona, pero si indagabas más en su cabeza seguramente seguiría siendo el mismo retorcido Hargreeves que todos conocemos. Al sentarse enfrente de nosotros, Cinco habló comenzando la conversación.

— Hola, Diego —Parecía relajado, pero sabía que por dentro no lo estaba— Te sienta bien el blanco. 

— Al fin aparecieron —Dijo Diego, desviando la mirada a la mesa y volviéndonos a mirar.

— ¿Cómo sabes que vendríamos? —Pregunté acercándome un poco más, Diego hizo lo mismo.

— Siempre hacen una mierda así —Opinó un poco molestó, pero trataba de disimular.

— ¿Y los demás? —Dijo el castaño, esperando una respuesta afirmativa de el de pelo largo. El último nombrado alzó una ceja.

— ¿No están contigo? —Contestó incrédulo. Suspiré.

— Sé donde está Allison —Hablé, logrando que ambas miradas se posaran en mí, esperando que siga hablando— Es decir, vivo con ella —Tomé una bocanada de aire y seguí con la conversación— Está casada, con Raymond, es un buen chico.

— ¿Casada? —Rió leve irónico el de pelo largo.

— Sí, casada —Confirmó Número Cinco, lo miré— Lo mejor será que busquemos a los demás.

— ¿Cuánto tiempo llevas aquí? —Cuestioné cambiando de tema para que no sea tan incómodo.

— Setenta y cinco días, aparecí en el callejón de Commerce...

Y Knox —Dijeron ambos hermanos al mismo tiempo. Diego asintió levemente.

— ¿Ustedes? —Preguntó.

— Cinco llegó esta mañana, yo estoy aquí hace tres meses —Desvié mi mirada.

— ¿Cómo me encontraron? —El azabache soltó una pequeña risa. Sacó el pedazo de periódico que Elliot nos dio, haciendo que Diego rodara los ojos y se tirara sobre la silla, recostándose.

— Página dieciséis —Comenzó— "Hombre trastornado con cuchillos fue arrestado en la calle Beckley al 1026" —Leyó, dejando el trozo en la mesa dándoselo a Diego— Ahí vive Lee Harvey Oswald, ¿Algo que explicar?

— Digamos que la policía de Dallas no valoró mi intento de detener el asesinato de Jhon F. Kennedy.

— Sí, porque todavía no ha pasado —Dije obvia.

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⏰ Última actualización: Mar 30, 2021 ⏰

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¿En serio, Cinco?《Número cinco y tú》© CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora