«1mes mas tarde»
-Magnus esperame.
Le digo corriendo de tras de el escaleras abajo, no se va a librar tan facilmente de mi, llego asta su habitacion que se alla cerrada y grito:
-Abreme.
Me responde de mala manera y me deja entrar, le miro fijamente, sigue igual de perfecto y ya ha pasado un mes desde que nos conocimos, pense que seria imposible hacerle cambiar pero ahora ya no es frio conmigo y sonrie mas amenudo, yo tambien he cambiado ya que he dejado de ser timida y retraida con los demas ahora ablo con los sirvientes y nos llevamos bien todos, he recibido muchos regalos hoy de parte de ellos por mi cumpleaños pero Magnus no me lo quiere dar asta que sean las once de la noche y apenas son la una de la tarde, lo he perseguido toda la mañana intentando convencerlo desde que me dijo que tenia una sorpresa para mi ayer por la noche.
-Por favor, dime que es.
Digo haciendo pucheros y acercandome a el que se alla acostado en la cama sin mirarme, leyendo un libro en Aleman, sabe muchos idiomas y le encanta presumir de ello, me ignora asi que me subo a la cama sin importarme que el vestido se arruge, mi precioso vestido azul cielo de tirantes corto por la rodillas, ando siempre descalza ya que los tacones no son lo mio y es lo unico que hay en el armario aunque le alla insistido en que me comprara unas sandalias sin tacon, tampoco me hace caso asi que me la paso descalza.
-Magnus sabes que cuanto antes me lo des antes podre agradecertelo.
Digo seductoramente agarrando su libro y cerrandolo, por fin me mira con sus ojos azules, alza las cejas curioso y dice:
-Isabella, no voy a cambiar de parecer, te esperas a las once como una niña buena.
Agarra su libro de mis manos y me vuelve a ignorar, eso me da mucha rabia ya que a rechazado mi prepocicion por ser un maniaco del control, le voy a dar su merecido.
-De acuerdo, tu sigue leyendo, yo llamare a Matt para que venga a verme por mi cumple.
Digo levantandome de la cama sin mirarlo, como si fuera normal llamar a uno de sus hijos para que este conmigo, se que Matt es el unico que supone competencia para Magnus ya que es el unico que osa desafiarle. Salgo de la habitacion y voy a la mia en busca del movil, como decidi quedarme con el y no volver a mi casa me permite llevar un movil y usar un ordenador sin control pues le prometi que no trataria contactar con ningun humano tras ser amenazada con la decapitacion y aunque en mi mente me hago creer que me lo decia en broma aunque se que su amenaza era verdadera y no quiero tener el mismo destino que mi familia.
Llego a mi habitacion y cojo el movil para llamar a Matt y hacer rabiar a Magnus otra vez, a Matt no le importa, él vive para fastidiar a su padre, eso fue lo que me dijo la ultima vez que ablamos. Lo conoci cuando vino con Gaspar a verme, segun ellos era el nuevo trofeo de su padre y a los vampiros les encanta evaluar los juguetes de los otros vampiros, es cruel y horrible pero yo no me considero un juguete desde que Magnus les dio una paliza por decirme esas palabras tan feas y intentar morderme en su ausencia.
-No se te ocurra llamar.
Dice la voz de Magnus despertandome de mis ensoñanciones, dejo el movil en cualquier sitio y me giro a mirarlo ya que se alla en la puerta con una mirada llena de cabreo, la ignoro y me acerco a el con mi mejor sonrisa.
-¿Me vas a dar mi regalo?
Le digo inocentemente, el gruñe y me dice que si agarrandome de la mano, vamos a su habitacion en silencio y sin decir nada aunque este deseando decirle que he ganado.
Me suelta y va directo a uno de los cajones de su escritorio y saca una cajita roja, me la extiende si decir palabra, la cojo emocionada y la abro, es un hermosa cadena larga de oro con un corazón dorado, lo miro de cerca y veo inscritas unas palabras en otro idioma que no entiendo.
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Mordiscos*PAUSADA*
VampireIsabella una chica soñadora con un pequeño problema, escucha voces desde que era una niña y eso le impide tener un vida normal y todo se complica más cuando conoce a Magnus un vampiro frio y posesivo que no la dejara escapar fácilmente de su vida. "...