Mordiscos*PAUSADA*

Capitulo 12

-Espero una respuesta Magnus.

Le digo mirándolo de manera seria para que vea que esta vez no podrá salirse con la suya, sus ojos me miran con mucha rabia y eso me atemoriza pero no estoy dispuesta ha ceder, si no me ha gritado es posible que esta sea mi única oportunidad de tener el mando en una pelea, si esto se puede llamar pelea.

Al no obtener ninguna respuesta y solo recibir fuego de sus ojos, le cierro la puerta sin dudar. Miro a Matt que solo encoje sus hombros y se tira en mi cama, me quedo enfrente de la puerta dudando entre volver a abrirla o no y eso me hace escuchar unos murmullos que provienen del otro lado de la puerta que se van haciendo mas bajos, lo que me deja claro que Magnus no piensan hacer nada mas por mi.

-Ahora mismo no te tiene mucho cariño...

Dice Matt despertándome de mis ensoñaciones, le miro con gracia ya que lo ultimo que me tiene su padre es cariño como mucho posesión, eso hasta que se canse de mi.

-Tampoco es que el sea míster simpatía, ya se le pasara.

Digo restándole importancia, tarde o temprano volverá y tal vez venga con unas disculpas o con un látigo. Prefiero la primera opción y que la segunda solo sea mi imaginación sádica, maldito vampiro.

-Dejemos de lado a tu padre y hagamos algo entretenido.

-Me parece una buena idea he pensado que tal vez tu podrías usar...

-Guárdate tus ideas pervertido.

Digo nada mas ver sus intenciones, que chico mas enfermo siempre pensado en la misma cosas. Prefiero hacer algo mas productivo y opto por usar su grande boca para descubrir mas cosas sobre el mundo sobrenatural.

Según Matt mi mente es una "pasada" ya que no sé puede creer que halla sido capaz de retener todo lo que ponía en el libro que cogí prestado de la biblioteca de abajo, se lo he repetido desde lo primero que son los ángeles hasta los últimos de la rama sobrenatural que son los "zombies" según el ya que el termino adecuado son humanos devueltos a la vida de manera incompleta, al parecer no todos los hechiceros y brujas tienen el suficiente poder para terminar ese ritual.

-Venga suelta ese rollo a cualquier persona y te dirá que son zombies y cuando los veas me creerás.

Dice Matt que no se cansa de repetirme eso puede llamarme "pasada" según sus términos de los años 80 pero soy aburrida y eso lo tiene claro, se supone que soy humana pero hasta yo se que los zombies no existen, esos de las pelis que te muerden y ya eres uno de ellos lo mismo que sucede con los vampiros, solo son cuerpos putrefactos esa es mi conclusión.

-No me interesa ver uno.

-Venga no seas aburrida, es divertido jugar con ellos... Y mi padre tiene unos cuantos en el sótano sino recuerdo mal.

-¿Hay sótano?

Pregunto sorprendida por la nueva información, el asiente y sonríe de esa manera que todo niño muestra antes de hacer una maldad.

Me agarra de la mano y se me va el mundo al sentir una fuerte sacudida por el cuerpo que me hace cerrar los ojos y dar nauseas. Al abrirlos descubro que lo que tengo enfrente no es mi habitación y que Matt viene cargado de cosas que no están en los libros.

-¿Como hemos terminado aquí?

Es mi primera pregunta al ver el pasillo oscuro iluminado por unas pocas luces y el tener una puerta bien cerrada con varios candados que no huele precisamente bien, por lo que me hace echarme hacia atrás y mirar a Matt de manera inquisitiva.

-Es uno de los trucos de los vampiros, ya sabes, somos como magos.

Dice restándole importancia, sabia lo de la teletransportación pero no el que se podía usar en más personas, este chico me va a volver loca.
Puede que tenga mis secretos y que ahora ni sea humana pero no hace falta que todo lo sobrenatural decida aparecer enfrente mio de golpe.