Las Locuras de Eren Jaeger

Test de Infidelidad

¡SU AMADA MEY ESTÁ DE VUELTA, Y VIENE CON NUEVOS CAPÍTULOS, ALGUNOS EMOCIONANTES, OTROS NO TANTO, PERO SUMAMENTE SABROSOS!

Notita en el final✨

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Oh, si, una cita con Levi, en un lujoso restaurante, a las afueras de la cuidad, completamente solos... solo ellos dos.

Sentía que en cualquier momento se desmayaría, se imaginaba a ellos solos sentados en el capó de su auto, matándose a besos y a palabras dulces, de sólo pensarlo se exitaba, estaba emocionado, era su tercera cita, según él, era la más importante, por eso mismo, estaba a punto de un colapso.

Yo creo que es mucha emoción por una simple cita...

- ¡Armin, no puedo creerlo! - El castaño estaba más feliz que nunca, si bien Levi no era de invitarlo a salir, esa mañana del anterior jueves le había llamado desde su oficina para avisarle que hizo una reserva en el hermoso restauran propiedad de su madre, pero eso su novio no lo sabía, así que no importaba, aparte de que su madre no se daría cuenta. - ¡Él es tan hermoso, tan maravilloso, simplemente es el hombre más bueno del planeta, sin duda será mi espo-! - 

- Si, si, Eren, hablas tanto de tu novio que hasta ya sabemos que caga a eso de las tres, no jodas, que asco - La mueca de asco que el niño soltó hicieron al menor carcajear, si bien era cierto, tampoco lo hacía tanto como Armin dijo.

- No puedo evitarlo, los elogios se me escapan de los labios, es imposible - Dijo, mientras bebía de su nuevo batido de piña, sentados en la mesa de la cafetería, ambos jóvenes intercambiaban palabras triviales disfrutando de lagunas bebidas en espera de su compañera.

Armin notó un extraño brillo en los enormes ojos verdes de su amigo, jamás lo había visto así ,en su corta vida, Eren había rechazado a cual nombre se le cruzara, pero desde que la presencia del azabache el la vida de su hermano, no pudo dejar de pensar en lo orgulloso que estaba.

Pasadas unas horas, la muchacha los llamó, disculpándose incesablemente por no poder llegar a tiempo, pero anunció por mensaje que pasaría por el hogar del castaño para dejarle unas cuantas cosas, también dijo que tenía algo importante de lo cual hablarle, así que con algo de prisa, el dúo dejó de comprar faldas y blusas para ir donde Mikasa.

En la mente de Eren no paraba de pasar la misma pregunta ni la misma imagen, esa mañana su amado novio le había mandado una imagen de él siendo brutalmente embestido contra su cama, amarrado contra el respaldar y con unas pequeñas pinzas en sus pezones, se avergonzó tanto, que hasta le dijo unos improperios, esa imagen venía acompañada de un mensaje provocativo:

"Espero tenerte esposado y agachado para la próxima, Bebé"

Esa tarde se masturbó en el baño de su habitación, imaginando que el vibrador que tenía dentro era el gran pene de su amado azabache, tuvo problemas a la hora de venirse, su próstata, no pudo encontrarla, por lo que tardó un poco más de lo normal.

¿Dónde estábamos?...

Ah, ya me acordé...

Bueno, dejando eso de lado, la pregunta que se estaba haciendo tenía en duda el tema del que su amiga quería hablarle, pensó en miles de posibilidades, por ejemplo, que se le haya roto una uña, o que se le hayan terminado las mascarillas, ¡O que se le hayan terminado las prendas nuevas!, sea cual sea, todas eran terribles e importantemente importantes.