Sin reencores

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El sol salió por fin después de la temporada de lluvias que había habido, el cielo despejado se veía realmente hermoso.

______ tomó su celular y le marcó a Sugawara, él le contestó de inmediato.

- Hola cariño, ¿Cómo estás?

- Buenos días Suga-san, me encuentro muy bien. Sé que no suelo hacer llamadas, normalmente hablamos por mensaje de texto o en persona, pero necesito que vengas a casa, quiero hablar contigo.

- ¡Ahí estará! ¿Qué quieres que lleve? ¿Helado? ¿Pizza? ¿Alitas? Lo que sea, tú decides.

- ¿Q-Qué? ¡Nono! ¡No es necesario! Solo charlaremos. - rió.

Suga comenzó a reír detrás del teléfono.

- Te conozco, amas la comida. Bueno, allá estaré.

- Te esperaré.

______ al terminar la llamada se había dado cuenta de algo, estaba en pijama.

Corrió rápidamente al baño y se dió una ducha rápida, se puso la primera ropa que encontró en su armario, se cepilló el cabello y se puso muy, pero muy poco maquillaje.

El timbre de la casa sonó, la madre de ______ lo recibió con una gran sonrisa.

- ¡Suga-chan, extrañaba verte por acá!

- ¡Hola, que milagro señora! - sonrió y alzó la bolsa que llevaba en manos. - Traje pizza y alitas por si gusta.

- No tengo hambre, pueden comer ustedes.

- ¿Segura? Sabe que no hay problema.

- ¡Segurísima!

- Bueno. - sonrió.

Suga y _____ subieron al segundo piso en donde estaba su cuarto, se sentaron sobre la cama y comenzaron a comer lo que Sugawara había traído.

- Te dije que no era necesaria la comida.

- Es que yo también tenía hambre.

_____ comenzó a reír, Suga hizo lo mismo.

- ¿Y bien? ¿Para qué querías que viniera amor?

- Yo... vi a Oikawa.

Suga guardó silencio, pero su expresión era extraña.

- ¡N-No es lo que crees! Quiero hablar contigo lo que hablé con él.

- Soy todo oídos.

______ comenzó a contarle a Suga cada detalle de lo que Oikawa había dicho, y el como se sentía culpable respecto a lo que había hecho. Le contó cada una de las palabras dichas por el castaño, incluso le contó lo que ella había respondido. _____ estaba algo nerviosa, había decidido perdonar a Oikawa y dejar a un lado los rencores ¿Pero qué pensaría Suga de eso? Ellos dos se pelearon, Suga se dejó llevar, pero no quitaba el hecho de que la culpa era de Oikawa. Entonces... ¿Realmente estuvo bien que lo perdonara?

- Cariño, entiendo porque Oikawa actuó de esa manera, y aunque haya sido un error suyo, no me veo en la necesidad de tenerle rencor o alargar nuestra rivalidad como enemigos. Quiero hacer las pases con él, tal vez no ser grandes amigos, simplemente cesar los problemas y dejarlos atrás. Iwaizumi tuvo razón y guió a Oikawa por un buen camino, me alegra que se haya arrepentido y pedido perdón, nunca es tarde para madurar y crecer como persona, así que esta bien que lo hayas persona, eres una chica increíble, y eso es algo que me gusta de ti, no eres una chica rencorosa a pesar de todo.

- Suga-san, sabía que lo entenderías y qué harías las pases con Oikawa, gracias por respetar mi decisión y cooperar, te amo.

- Yo también te amo cariño, creo que me haces querer ser una mejor persona.

- Ya eres una buena persona. - sonrió.

- Quiero ser mil veces mejor, para que así no tengas razones para dejarme.

- ¡Suga! Jamás te dejaré, eres especial.

- Ven aquí cariño.

Suga extendió los brazos, ____ se abalanzó a él y ambos cayeron acostados sobre la cama. Sugawara comenzó a hacerle cosquillas por todo el cuerpo a su novia, sus risas se escuchaban por toda la habitación, eran felices.

Suga comenzó a dar pequeños dulces besos en los labios de su amada, ella solo sonreía, sus mejillas se sonrojaban más y más con cada beso de su novio.

- ¿Ya te dije que eres la chica más preciosa que mis ojos hayan visto antes?

- ¿Y yo ya te dije que eres el mejor chico del mundo?

Suga rió. - Me parece que ya lo habías dicho, pero me gusta escucharlo.

- Lo escucharás siempre. - sonrió.

Suga acariciaba con dulzura la suave mejilla de ______ y con la otra hacía lo mismo con su cabello.

- Gracias por estar para mi. - susurró Sugawara.

- Gracias por tu estar para mí.

...

Pasó exactamente una semana, Sugawara pudo regresar a los entrenamientos.

Al salir de clases, los chicos se dirigieron al gimnasio, ______ y Kiyoko llegaron primero como de costumbre y esperaron a que los chicos se pusieran el uniforme deportivo.

- ¡Suga-san te extrañé!

Suga se acercó a Hinata y revolvió su cabello naranja. - Nos vemos todos los días Hinata. - rió.

- ¡Pero ya quería que regresaras a los entrenamientos!

- Hinata tiene razón, hacías falta Suga. - añadió Daichi.

______ se acercó y colocó ambas manos en los hombros de su novio. - Prometió ya no meterse en problemas, ¿Verdad Suga?

- Es verdad. - rió.

El entrenamiento transcurrió con normalidad, los chicos se estaban divirtiendo, claramente tomándolo con seriedad, ya que entrenar era algo importante.

Al finalizar el entrenamiento, todos los chicos estaban guardando los balones, el atardecer estaba a su mayor resplandor.

_____ tomó su mochila y salió del gimnasio, se quedó un rato observando el cielo, se veía hermoso. De la nada, sintió como una manos rodeaban sus hombros, alzó la mirada, era su novio.

- ¿No es hermoso?

- Lo es, allá se encuentra Anaru-chan.

Suga sonrió algo desanimado, seguramente era demasiado difícil perder a un familiar, se veía que _____ amaba con toda su alma a su hermana pequeña, sin duda ella era bastante fuerte.

- Sí, ahí se encuentra Anaru-chan, seguramente está orgullosa de su hermana mayor.

- ¿Enserio crees eso?

- Estoy seguro de que lo esta. ¿Dijiste que amaba el voleibol no? Seguro esta orgullosa de ti por escoger ser nuestra manager.

- Eso espero...

...

Los tqm uwu

Por el destino (Sugawara y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora