XIV

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Sus ojos no podían estarlo engañando tanto.

Jimin estaba ahí. Frente a él. Sonriéndole. Viéndole.

-Ya deja de mirarme así.- Dijo el rubio desviando la mirada de la fija de su novio.

-Tú... No deberías verme...- Supuso el castaño sospechando de que algo no estaba bien.

-Bah, da igual... Te extrañé demasiado...- Restó importancia Jimin.

Jungkook intentaba concentrarse en pensar bien en qué mierda estaba pasando frente a él y también qué mierda estaba haciendo en la puerta del departamento de Jin cuando él estaba antes en el cementerio; todo había pasado tan rápido que ni siquiera lo pudo notar. El tacto de las suaves y pequeñas manos sobre su rostro y cuello no le dejaban pensar claramente por lo que se dejó llevar por lo que Jimin le decía que hicieran.

La confusión seguía latente al darse cuenta de que Jimin le hablaba con normalidad y nadie lo miraba raro tachándolo de loco así como que podía sentir sin problemas la misma temperatura en ambos cuerpos, todo era demasiado extraño y no lograba procesarlo completamente aun.

-Jimin, ¿por qué no dejaste que me fuera? ¿Por qué me ataste a tu vida?- Preguntó Jungkook cuando se hallaban acostados en el césped de un parque.

-Porque no tenía planeado dejarte ir otra vez. Ya sufrí demasiado pensando en que te había perdido para siempre cuando realmente estuviste conmigo, por lo que ni loco habría dejado que te fueras realmente.- Contestó como si atara a espíritus errantes en la tierra a su vida todos los días.

-Ahora no podrás deshacerte de mí por mucho que quieras. Recuerda que Jin siempre se aterraba cuando hacíamos chistes sobre atarnos a la fuerza incluso en la muerte con la excusa de que un espíritu atado a la vida ya no podía volver a fusionarse con su muerte o algo así, nunca lo comprendí bien.- Intentó explicar el castaño confundiéndose con su explicación haciendo reír al más bajo.

-Según él, un espíritu atado a un vivo por decisión del vivo después no puede volver a pedir por su muerte, porque como que toma la vida del vivo junto con el vivo, ¿se comprende? Como que comparten la vida en el sentido más literal.- Aclaró el rubio.

-Exacto. Ahora no podrás deshacerte de mí nunca más. Haré que tu ropa no se salga de tu cuerpo si encuentras otra pareja solo para joderte la existencia.- Bromeó Jungkook jugando con el cabello de Jimin.

-Ya no siento interés por nada ni nadie.- Soltó con indiferencia Jimin.

-¿No tienes frío?- Preguntó el castaño al ver que estaba anocheciendo y que el viento comenzaba a marcar presencia haciendo las hojas de los árboles danzar a su canto.

-No. Para nada. Ni frío ni calor.- Respondió con una brillante sonrisa el más pequeño abrazando con fuerza el torso de su novio.

El momento era simplemente perfecto; el sonido de las hojas de los árboles siendo sacudidas por la brisa nocturna, el cielo con una que otra estrella y bastante iluminado por las luces de calles y edificios, el parque siendo poco concurrido dejándolo poco menos que exclusivo para ellos, nada podría arruinarlo aun con esa duda existencial todavía rondando en la cabeza de Jungkook acerca de cómo Jimin logró ponerse en contacto directo con él.

-Mi amor, no me mientas. ¿Qué hiciste para poder verme?- Preguntó con seriedad sin llegar a ser brusco en su tono de voz al formular sus palabras.

Jimin sabía que esa pregunta no iba a demorar y que tendría que contestarla a como diera lugar, pues lo hacía él por las buenas o Jungkook lo iba a averiguar por las malas.

𝙺𝚗𝚘𝚌𝚔 𝚔𝚗𝚘𝚌𝚔 - ☾︎Kookmin☽︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora