Capítulo 12

450 47 0
                                    


El día no transcurrió tan rápido como ___ y Billie deseaban, ambas se sentían ansiosas ante su nuevo encuentro que tendría lugar durante la noche. Tuvieron miles de asuntos que atender relacionados a sus trabajos, pero eso no mermaba en ellas la emoción y sensación de anhelo de volver a tenerse cerca mutuamente.

La empresaria sostuvo tres juntas, cada una más intensa y estresante que la anterior. Tuvo que hacer frente a los compromisos del día anterior que fueron pospuestos por su salida inesperada con la pelinegra, ni siquiera pudo salir a almorzar y se resignó a comer una pizza en su oficina para poder avanzar con la mayor cantidad de pendientes posibles y poder estar a tiempo para su compromiso con la señorita Hawk.

___ tuvo varias entrevistas que atender durante el día relacionadas a su participación en el certamen de los noveles diseñadores, los medios se disputaban una charla con ella para aclarar ciertos rumores sobre una posible aparición especial como modelo en la pasarela central que presentaría Carolina Herrera quien desde sus inicios se convirtió en su mentora. Tanto ella como los organizadores se encargaron de desmentir esos rumores para no generar expectativas erróneas del espectáculo.

Eso no era nada nuevo para ella que estaba más que acostumbrada a ser el centro de atención tanto en su vida personal como profesional, se podría decir que lo disfrutaba, que se sentía en medio de un oasis. Como era de esperarse las preguntas sobre su vida personal y amorosa tampoco faltaron, pero con la misma maestría de siempre logró sortearlas y responderlas de manera sutil, desviando la verdad y poniendo atención en otros temas. Por alguna razón cuando uno de los reporteros le preguntó si su corazón ya tenía nuevo habitante no pudo mentir y solo esquivo responder ese cuestionamiento en particular, no sería capaz de decir que no había una dueña cuando durante los últimos tres días sus latidos llevaban nombre y apellido.

Después de sus respectivas y extenuantes jornadas laborales, las jóvenes procedieron a prepararse para su encuentro en la privacidad de sus habitaciones. Más allá del cansancio del día la emoción de verse y estar juntas era más fuerte, cada una lidiaba a su manera con las emociones y el nerviosismo que amenazaban con sobrepasarlas en cualquier instante.

___ había optado por sumergirse en la tina con algo de aroma terapia para lograr renovar energías y verse lo más hermosa posible durante su velada con la rubia. Como no tenía idea del lugar al cual la llevaría Billie aquella noche decidió usar un vestido en tela ligera y floreada con ciertas transparencias que no eran visibles en su totalidad por encontrarse cubiertas por un saco gris hermosamente moldeado a su espectacular figura a través de un sencillo y elegante cinturón negro. Eligió dejar su larga melena azabache suelta y cubrir su rostro con una delicada capa de maquillaje que acentuaba sus rasgos perfectos.

Billie por su parte utilizó cada una de las cosas que su hermana había dejado dispuestas para ella. Después de tomar una relajante ducha se vistió con las prendas que estaban sobre su cama, se colocó unos simples pendientes, decidió recoger su pelo en un sencillo moño que dejaba ver su largo cuello. En cuanto al maquillaje, no pudo evitar la risa que se apoderó de ella cuando recibió un mensaje proveniente de su hermana que contenía un video tutorial de cómo debía maquillarse para combinar correctamente cada detalle de su vestuario.

Una vez estuvo lista pidió al chofer las llaves de su auto y emprendió camino al hotel en busca de la pelinegra.
Por lo general nunca tomaba el volante, pero aquella noche era especial en todos los sentidos, deseaba que ___ sintiera cómoda a su lado y no la viera como la típica mujer adinerada y aburrida de Londres.

Faltaban diez minutos para las 21hrs cuando la espectacular diseñadora aparecía en la recepción del hotel tal y como lo habían acordado previamente, la rubia no se percató de su presencia porque se encontraba conversando con el gerente del establecimiento quien después de reconocerla se acercó a ella para ponerse a su disposición. La charla era breve y no tenía importancia alguna ya que solo se trataba de saludarse.

___ caminó hasta ella derrochando gracia y belleza que no pasó desapercibida para algunas personas que se encontraban allí en ese momento, al estar a pocos pasos Billie giró un poco su vista y finalmente pudo verla mientras se acercaba. Con cada paso su corazón aumentaba el ritmo de sus latidos haciendo que el nerviosismo que había logrado controlar un poco antes volviera a aparecer. La morena era como una especie de visión que tenía lugar frente a sus ojos, cada detalle de aquella mujer parecía ser de otro mundo. Su belleza la dejaba sin palabras.

Tú, Yo & Nuestra historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora