،∦ 𝐌𝐎𝐎𝐍𝐋𝐈𝐆𝐇𝐓︱douma ʾ

ƇαρίтυƖσ - 24

Me levante al sentir un vacío a mi costado, me senté para dar un vistazo a toda la habitación asegurándome de que, si estaba completamente sola, me coloque un kimono para cubrir mi cuerpo y salir a buscar a mi peli rubio. No tarde mucho pues estaba en el mismo jardín donde hablamos por primera vez sentado en la fuente con una mirada perdida.

- ¿Te encuentras bien? - pregunte pues no se había percatado de mi presencia cuando llegue.

Me acerque a donde se encontraba tocando su mejilla con mi mano para que me mirara, me dio una pequeña sonrisa y coloco su mano sobre la mía quitándola para colocar un suave beso sobre ella.

- S-si no tienes porque preocuparte - aunque me dijera que estaba bien, no estaba completamente segura sabía que había algo que lo preocupaba y es algo que sabía con exactitud.

Al pasar de los días me tenía aún más preocupada, sabia por Kaito que aun Giyu me seguía buscando, no perdía la esperanza de encontrarme con vida, aunque ni siquiera sabia porque lo pensaba jamás había planeado mi muerte solo había desaparecido, pero no había sido por mi decisión.

Quería ir con el y demostrarle que estaba bien pero no podía arriesgarme a que averiguara en donde había estado todo el tiempo podría poner en peligro a Douma y mas cuando es una luna demoniaca, estaba entre la espada y la pared.

- Mandaste nuevamente a tu cuervo - Douma se acercó hacia mi abrazándome por detrás mirando el mismo punto que yo - puede ser peligroso si lo descubren.

- Confió en Kaito... puedes estar tranquilo - me voltee para quedar frente a el y poder juntar nuestros labios, me gustaba cada momento que estábamos juntos - desearía siempre estar contigo.

- Siempre estaremos juntos eso ni lo dudes - dijo para pegar de nuevo sus labios sobre los míos.

Se que aun permanecíamos en una burbuja de felicidad, la cual pensamos que nadie la quebrantaría, pero sabía que no era así, tenia que asegurarme que nadie la rompiera.

- No me gusta la idea de que salgas podrían encontrarte y llevarte con ellos.

Sabia que Douma se molestaría de mi repentina salida y cuando lo comente me pregunto la razón del porqué, pero no le respondí haciéndole enfadar, ya tenía una idea y quería cumplirla, todo era por nuestro bien.

- Ni siquiera me dices porque debes irte o a donde... tengo miedo de no poder encontrarte - al decir lo último toco mi corazón

Me había dicho lo mucho que me extraño la primera vez que me fui y me enteré por la señora Nozomi y Saki lo decaído que había estado desde ese entonces, no quería que estuviera así, pero era muy importante ir a ese lugar antes de que sea demasiado tarde.

- Para mi también es difícil, pero necesito que confíes en mi - dije mirándolo nuevamente - puedes confiar en mi Douma.

- Si confió en ti, pero tengo miedo de perderte - me acerque mas a el para poder tomar su rostro entre mis manos, yo lo veía, pero el desviaba su mirada - no quiero que corras peligro.

- No soy una persona común, soy un pilar se cómo defenderme.

- No confió en eso - lo mire mal - sé que sabes defenderte, pero siempre que te he encontrado estabas en peligro.

- Fue una vez - el me miro de forma de que no lo era - bueno dos, pero la primera fue por distracción y la segunda fue porque tu amiga... - el me miro con una ceja alzada, sabia que no tenia excusa por eso - ya bueno talvez tengas razón, pero necesito que esta vez confíes en mí.

- Está bien confió en ti - sabia que su palabra no era del todo cierta.

- Y no puedes seguirme me daré cuenta si lo haces - soltó un suspiro frustrado, sabía que me daría cuenta.

Aliste las cosas que necesitaba, me puse mi atuendo de cazadora, solté mi cabello algo distinto a la coleta que usaba, tome la katana que me dio Shinobu colocándola en mi cintura. Me miré en el espejo observando una nueva versión de mí, el cambio en verdad me sentía bien, salí de la habitación encontrándome a Douma en el pasillo maravillado de mi nueva apariencia.

- Jamás pensé verte de nuevo con ese traje, pero te sienta demasiado bien el cambio...tardaran en reconocerte.

- Gracias por los cumplidos mi querido demonio - dije lo último en un tono bajo - pero debo irme - con lo que mencione nuevamente cambio de expresión a una triste - pero esta vez volveré.

Nos dirigimos a la gran puerta para mi salida como era de día no podía cercarse afuera.

- Te voy a extrañar.

- Ni siquiera te darás cuenta el tiempo pasara rápido... te enviare una carta cuando llegue así sabrás que no me paso nada - me acerco a el para abrazarme - me impregnas tu olor.

- No crees que sea bueno - me miro con su sonrisa burlona

- Puede ser... así sabrán los demonios que no deben acercarse a mi porque soy "tu presa" - resalte lo ultimo entre comillas recibiendo una risa de su parte la cual también fui participe.

Me despedí de el encaminándome a donde iría, solo esperaba poder encontrarla en el nuevo lugar en donde me había informado Kaito, sabia que me iba tomar tiempo hasta podía decirse días, como prometí envié a Douma varias cartas explicándole de que talvez me tomaría más tiempo de lo debido y podía ver en las cartas que el también me enviaba que no le parecía esa idea, pero era lo mejor estar alejada de el en estos momentos ya que la situación estaba un poco tensa.

Aun no perdía la esperanza y por todo lo que había revisado este era el ultimo lugar que quedaba solo debía estar atenta, entre en un pasaje donde no transitaban tantas personas o mejor dicho ninguna, tenia que revisar el lugar hasta dar con la entrada que no era fácil a simple vista, hasta que por fin pude encontrarla.

- (t/n) - escuchar aquella voz femenina me hizo ver por fin que había llegado - pensé que no nos veríamos otra vez.

- Yo tampoco, pero esta vez necesito de tu ayuda Tamayo-san.

Perdón por no haber subido capitulo es que cada vez tengo poco tiempo para escribirlo y a la vez es difícil ya que ya faltan pocos capítulos para que esta historia llegue a su final...

Sin mas que decir nos vemos en el próximo capítulo...