"Te lo di todo y aún así"

69 1 0
                                    

Era de noche en el satélite. El sonido era nulo, lo que hacía todo más tétrico. El lugar estaba más frío que de costumbre, los pasillos sombríos y la noche llenaba el espacio. Vivir en el espacio puede ser bastante deprimente, «según la universidad de ... no se que». Gwen había olvidado el nombre de tal prestigiosa institución, pero sin embargo no olvidaba aquel estudio.

Según el estudio, todos los participantes mostraron signos de depresión, y Gwen no se sorprendía porque ese lugar era bastante horrible y tétrico. Los pasillos estaban llenos de pestilencia y malas energías. Usualmente Gwen corría cada vez que le tocaba regresar sola a casa. Sin embargo esta vez caminaba lentamente porque sabía que Duncan la esperaba.

Duncan era una persona impredecible y no sabia cómo iba a reaccionar. Cuando se enteró que estaba embarazada le pidió que se olvide de esa idea absurda que tenía Gwen de ser mamá. Que el no va andar criando hijo ajeno. Gwen le lloraba que el hijo era de él

Cuando entró, Duncan la vio y empezó a gritarle que que había hecho con su hijo. Gwen seguía llorando, Duncan no podía creer lo que había hecho Gwen con su hijo. «Era una mala persona y ojalá se pudra en el infierno» pensaba Gwen de si misma.

Duncan culpaba a Gwen constantemente de haberlos traído hasta este hoyo, aún cuando era ella la que trabaja. En su defensa el hacía los cachuelos que pagaban la renta. Duncan era completamente infeliz en ese hueco al que llamaban hogar.

Hace unos meses Duncan mientras realizaba un trabajo en Saturno, el cual no era el mejor trabajo pero si el que más fácil y más plata dejaba. Tenía la misión de envenenar a un funcionario de medio pelo, pero sin él, no se pasaría una ley que prohibía el uso de armas láser en la constelación adyacente. «o algo así era» no había leído bien Duncan.

Estaban en un domo, lleno de gente importante por como se vestían. Habían intentado hacer una réplica de un parque en ese lugar, pero que raro que se veía todo parecía sacado de una revista futurista de su niñez. Mientras esperaba a su objetivo Duncan comía un sandwich de pollo que vendían en una pequeña estación de comida bastante auténtica para su gusto. «Mejor de lo que cocina Gwen»

A lo lejos la vio. Duncan estaba atónito y fascinado por ella, como puede ser que sea tan bella y tan mala a la vez. Duncan asumió que la maldad y la belleza están paralelamente relacionadas la una con la otra. Entre más mala más bella. El sol, la cual era un reflector de luz gigante, brillaba en lo más alto del domo, la gente se aglomeró alrededor para tomar sol. Todos con trajes de ejecutivos futuristas, parecían sacados de un cómic.

Entre que observaba a su objetivo para no perderlo de vista, y que se había distraído con el gracioso show que ponían los funcionarios públicos, Courtney había desaparecido. Duncan se resigno a perderla pero cuando de repente. Tenía una navaja en el cuello y a su nariz venía un perfume increíblemente sexy, supo entonces que era ella.

Duncan la miro de reojo, le sonrió y la intentó manosear. Courtney sin embargo se hizo para atrás, pero rápidamente regresó, se le acercó y lo besó. Courtney se le sentó al lado y puso su cabeza en su hombro. Duncan le acaricio el pelo y espero, a que su funcionario pase frente de él, porque según lo que lo había estado investigando, el señor todos los días venia a comer aquí. —¿Qué haces aquí?— preguntó Courtney sin esperar mucho. —Vengo por trabajo— contestó Duncan, sin pensarlo mucho. —Wow, Duncan un arma laser y un terno... ¿eres un asesino o un político?— Courtney lo analizó de pies a cabeza  —me imagino que un político, porque te encanta leer y estudiar, y el pueblo— Courtney sabía cada paso que daba Duncan, dónde vivía, que hacía, que comía, a quien mataba, todo. Courtney sabía todo acerca de él.

Courtney se le acercó provocativamente al odio — ¿A quién vienes a matar? — a lo que Duncan saltó del asiento en modo defensivo la apuntó, —ay Duncan, no causes una escena que la gente nos esta mirando, mejor siéntate y cántamelo que yo te puedo ayudar?— 

Total Drama: Después del dramaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora