• Capítulo 16 •

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Habían pasado ya dos días desde que Erin y Levi volvieron juntos al apartamento de la muchacha

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Habían pasado ya dos días desde que Erin y Levi volvieron juntos al apartamento de la muchacha. Luego de pasar el sábado juntos, Levi se vio obligado a irse el domingo al mediodía, incluso con el malestar latente de la gripe. Natasha había desaparecido, más no sus efectos personales ya que los había dejado en el apartamento de su protector.

Inmediatamente, Levi pidió a su gente que la busquen en todas las sucursales de la empresa, los hoteles que frecuentaban, los centros de estética a los que ella iba, incluso revisaron el apartamento, teniendo la esperanza de que estuviese escondida. Nada, así que habiendo cubierto las áreas donde ella se movía, Levi decidió salir en su búsqueda junto con Mike.

~|Levi|~

—Erin, una enfermera vendrá a verte más tarde. Necesitas el alta para trabajar mañana. —termino de vestirme y bebo el último sorbo de té.

—Gracias señor, ¿usted cómo se siente? Anoche no tuvo fiebre por suerte, pero debería hacerse un chequeo. —comenta intranquila.

—Estoy bien, te enviaré la ropa durante la semana y entrégale mi traje a mí cochero, por favor.

—Si señor, no se preocupe por eso. Gracias por quedarse estos días. —dice y se acerca a mí.

Nos quedamos mirándonos por un instante y la idea de quedarme aquí para siempre es tan tentadora. Hace un tiempo no tenía un descanso como este, aun estando enfermo, lo prefiero a estar en un club o cabaret bebiendo whisky, derrochando dinero, tratando de sanar...

—Debería irse ya, señor Ackerman. —observa y me entrega una cajita con medicamentos. —No se olvide de tomarlo.

—También te enviaré un teléfono celular especial, es para que te comuniques solo conmigo. —añado y me despido de ella.

Gracias, Erin.

Una vez fuera del edificio, me subo a mi auto rápidamente y me dirijo hacia mi apartamento. Mike estará esperándome allí para analizar por donde empezaremos a buscar a Natasha.

— ¡Disculpe! No puede entrar aquí, es propiedad priv... —Victoria me mira perpleja. —Señor, no lo había reconocido con esa ropa.

—Tsk, ya que estás aquí, dime que sabes de Natasha. —ordeno entrando en el elevador y ella me sigue. Desconfío de ella, pero quizá sepa algo. Dudo que Natasha haya sido tan insensata como para irse sin avisar a nadie y Victoria es la única persona que se me ocurre.

Al entrar en mi sala me encuentro con un despliegue de personal de inteligencia. Mike, Erwin, Hange y Nanaba están en la cocina reunidos bebiendo té y conversando. Mi presencia los hace callar de inmediato y presiento que algo ocultan.

Ay, amor 🔞 •// Levi Ackerman//•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora