PANDEMIA

1.-PRELUDIO: Era una vida feliz

Desperté estirándome en mi cama para luego girarme y ver el bello rostro de mi querido esposo.

Mi esposo desde ya hace más 37 años.

Automáticamente todos nuestros momentos juntos que vivimos se me vienen a la cabeza.

Cuando lo conocí a los doce años en la escuela.

Cuando me atreví hablarle a los 20 al estar ya en la Universidad ya que estaba enamorado de él desde hace 8 años. Y por suerte nos hicimos amigos.

Cuando se me declaró a los 23, ese perfecto día que nunca olvidaré.
Y tan solo meses después comenzamos una bella relación de amor y tuvimos muchas dificultades al no ser aceptados en el pueblo que vivíamos.

Simplemente porque nuestra forma de amar no era la correcta...

Cuando a los 26 al ya estar viviendo mucho tiempo juntos en la gran Seúl, dejando el lugar que alguna vez nos contamos llamar familia, decidimos casarnos para poder sellar nuestro amor con unos lindos anillos y ante unos papeles que siemplemente significa mucho para nosotros porque una relación como la nuestra no era muy común, menos aceptada.

Cuando por fin de tanto tiempo, a mis bellos 25 y los bellos 27 años de él, tuvimos el permiso de adoptar.

Cuando pasaron 14 años en los que vivíamos en perfecta armonía junto a nuestra pequeño hijo.

Muchos años después en el que aún nos amabamos sin falta, día tras día.

Años en los que envejecimos juntos.

En los que nos sonreiamos con dulzura al ver nuestras arrugas.

Momento que me hacía saber la larga historia que tenía viendole el rostro desde joven.

Cuando tratábamos de bailar pero nos dolía la cadera.

Momento que dejaba en claro lo gastados que estamos por no tener frenos en la juventud, dios...si que la disfruté, y aún lo hago.

Cuando reíamos y se veía nuestra gastada dentadura, dándonos mas risa.

Demostrando que desde siempre esas bellas risas de limpia vidrios eran para mí, y las mías, para tí.

Acariciar tus bellos labios junto a los míos en un dulce beso, sintiéndolos como siempre grandes, pero ahora algo caídos y con unas pequeñas gritas.

Demostrando otra vez que los gasté con mis besos, y tú hiciste lo mismo con los míos.

En los que disfrutaba mi vida junto a él y mi hijo.

Años que se convirtieron en un bello recuerdo, mis recuerdos contigo cariño.

¿Por qué no te dejaron un tiempito más a mi lado?

Le pregunto a la almohada que está mojada por mis lágrimas, la misma que está en tu lado de la cama y a un lado está doblaba tu pijama rosada de ceda.

Te extraño amor.....y no sabes cuánto.

JínTae~ •^•