Harry Potter y La Heredera de La Magia de Merlín (B1)

Capitulo VIII: ¡Feliz Cumpleaños, Lea!.

Ese día especial ocurrió tal cual Lea lo había imaginado.  Recibió desayuno en la cama y al bajar con el vestido que compro en el callejón Diagon, se encontró con Dumbledore, Doge y Lupin esperándola para un rico banquete que habían preparado Lazzy, Dopey y Bash. La velada fue muy cómoda y tranquila. Lo que no imagino fue que recibiera tantos regalos, más aun si eran personas que ella no conocía. Un tal Rebeus Hagrid le había regalado unas nuevas botas de "cuero de dragón". Minerva McGonagall un libro; Teoría mágica, de Adalbert Waffling. Alastor Moody un chivatos-copio. Dedalus Diggle una fina capa color malva. Y, para asombro de ella, el hermano de Dumbledore, Aberforth le regalo un anillo de oro precioso con la letra d forjado en su exterior.

"Este anillo perteneció a mi querida hermana, quien lo porto hasta su desgraciada muerte. Úsalo con orgullo cuando llegue el momento"

    Aberforth Dumbledore.

Lea decidió guardarlo, además es grabado en el anillo se le hacía muy familiar… "¡Claro!, es el sello personal del abuelo Dumbledore, cuando no ocupa el sello de Hogwarts en sus cartas", dedujo la pequeña, "¿Úsalo con orgullo cuando llegue el momento?", sonrió al releer esas palabras. Eso significaba que el extraño pariente de Dumbledore la aceptaba en la familia.

Afortunadamente para la pequeña, Lupin le explico todo cuando termino de leer la nota de su adoptivo pariente…

->Son miembros de la Orden. Sus regalos son muestra en agradecimiento que sienten por tu madre…

-> ¿Usted también la conoció? -pregunto algo asombrada.

->Sí -su semblante se entristeció un poco y dejo de comer- Al igual que a todos la conocí en la Orden. Era una mujer, que a pesar de querer aparentar ser fuerte… Era muy frágil -sonrió hacia la niña- Una delas mujeres más dulces que he conocido y sobre todo, una de gran corazón.

Una sonrisa ausente salió de los labios de la infanta. Quien fue interrumpida por Doge.

->Bueno… ya que ha abierto los regalos de esos presumidos… Es hora que veas el mío, ¿No?

Todos en la mesa rieron ante la actitud de vejete.

->Por supuesto y apuesto que será el mejor de todos, abuelito Doge -dijo entre risas al recibir un delgado regalo, para después besarle la frente al mago Doge en agradecimiento.

En cuanto lo abrió se quedó extrañada, era un bloc de dibujo, ni tan grande como el anterior suyo, pero ni tan pequeño, del porte de un cuaderno.

->Gracias -hablo muy feliz.

->Esa en la primera parte del regalo, Lea -agrego Dumbledore sacando de su capa su regalo. Era una pequeña cajita de cristal bien refinada dejando a la vista su contenido; un pincel plateado con letras grabada en el…

"El don de pintar y dibujar al mundo tal cual lo imaginas y ves… ESE es el arte. Tu arte"

La niña abrió la caja y saco el pincel. Estaba muy emocionada, pero al ver la mirada cómplice de su tutor, se controló, mirándolo con resentimiento.

-> ¿Por qué será que siento que esto no es todo? -pregunto con perspicacia.

->Estas en lo correcto. Como siempre, tus teorías aciertan sin inconvenientes -contesto muy alegre ante su pregunta.

->Ambos objetos están encantados, pequeña -explico con gozo Doge- Cualquier cosa que pienses mientras tengas ese pincel en mano y lo pongas en el bloc, se dibujara sola al instante…

->Pensamos que le darías un buen uso -agrego Dumbledore.

->Así que la pequeña cachorra nos salió artista, ¿Eh? -comento Remus muy sonriente.