The dollhouse |h.s| Traducida al Español.

Capítulo 14.

Holly.

Harry no mentía cuando dijo que deberíamos de hablar fuera.

Estamos en un parque muy bonito. El crujido de las hojas fluye en el aire, y la brisa fría de invierno golpea mi piel pálida mientras caminamos. Está vacío, como un parque fantasma, bueno, no es muy normal caminar por aquí a las diez de la noche. No sabía que iba a pasar tanto tiempo con él. Salimos a eso de las cinco, para ir a Scarlett, y hemos estado paseando sin rumbo por las calles de Londres, admirando las bonitas vistas en las que ambos crecimos.

"Sentémonos aquí." Dice, sentándose en la hierba verde.

Me siento a su lado. Las vistas son hermosas desde aquí. Estamos sentados en frente de un enorme lago que recorre todo el parque en el que se refleja la luna y esbeltos árboles y flores variadas nos rodean. Parece la típica fotografía que sale en los fondos de cualquier utensilio electrónico cuando se enciende por primera vez.

"Bien, ¿Seguimos con el juego?." Por eso estamos aquí, ¿No?.

"¿Tu película favorita?." Me dice, sin dejar de mirar al lago.

"Uhm, Mean Girls."

"¿La que más detestas?."

"Crepúsculo, sí, definitivamente esa." Ruedo los ojos pensando en las chicas gritando eufóricas por esa maldita película.

"¡Pero si las muñecas ponéis constantemente esa!."

"Pero la odio."

"No es que sea muy buena, per-."

El sonido molesto del iphone de Harry nos corta. Él lo saca de su bolsillo bufando. Por billonésima vez nos han fastidiado el juego.

"Hey."

"Sí."

"Bueno."

"Hmm."

"Muy bien, estaré allí en veinte minutos." Finalmente cuelga.

"Nos tenemos que ir." Dice, levantándose.

"¿A dónde?."

"A la casa de Zayn."

|En la casa se muñecas de Zayn|

Llegamos en unos quince minutos. Nos acercamos hacia la puerta atravesando un camino de piedras. Harry presiona el botón del timbre. La casa de Zayn el idéntica a la de Harry, sólo que un poco más pequeña.

"¡Hey!." Supongo que es ese tal Zayn. Es guapísimo. Tiene un delicioso pelo marrón recogido en un perfecto tupé ordenado. Su piel es de un tono bronceado, con unos ojos marrón que me recuerdan al chocolate derretido. Es más bajo que Harry, pero sólo un poco.

"¿Esta es la chica?." Pregunta Zayn.

"¿La chica?." Pregunto, confundida.

"Uhm, mejor vamos adentro." Harry dice, fulminando con la mirada a Zayn. ¿Qué?.

"Holly, mi muñeca, Mina, está arriba, ven con ella. Harry y yo tenemos que hablar sobre unas cosas en el salón." Zayn me dice.

Asiento y me dirijo arriba. Después de dar con tres puertas equivocadas, abro una con una perilla rosa. Veo a una chica sentada de espaldas en una enorme cama doble, viendo 'Pretty Little Liars'. La habitación es más pequeña que la nuestra. Sólo hay una cama. La televisión es mucho mejor que la que tenemos, y la cama parece de princesa; es rosa, baja y con cortinas que descienden de ella.

"Uhm, ¿Hola?." Mina apaga el televisor y se da la vuelta.

Tiene el pelo rubio fresa, con rizos que le llegan hasta los muslos, piel pálida y unos enormes ojos azules cristalinos hermosos. Es rellenita y muy alta. Yo diría que mide alrededor de 1'80.

"Oh, hola, soy Holly, la muñeca de Harry." Digo un poco molesta 'muñeca de Harry'. No me gusta que me llamen así, y tampoco soy de nadie.

"¡Qué bien!, ¡Ven, siéntate!." Mina acaricia el otro lado de la cama, indicándome que me siente. Me siento a su lado. Parece muy cariñosa.

"Bueno, háblame de ti, Holly." Y cotilla también.

"Uhm, tengo dieciocho años, nací en New York y me mudé aquí cuando tenía dos años.

"¿Tu deporte favorito?."

"La natación, he estado en campeonatos desde los cuatro años."

"¿Enserio?, ¡Yo también!."

Los siguientes treinta minutos los pasamos hablando. Nos llevamos muy bien, tenemos muchas cosas en común; a las dos nos gusta la natación, odiamos los molletes y Crepúsculo, y nuestros cumpleaños son el mismo día, el cuatro de febrero. Increíble, ¿Verdad?.

"¿Donde está el servicio?." Le pregunto.

"Camina en línea recta hacia delante, gira a la izquierda, está a tres puertas más abajo." Me indica.

"Gracias, ahora vuelvo."

Salgo de la habitación y sigo sus instrucciones. Giro a la izquierda, ¿La primera era, verdad?, sí, eso. Abro la primera puerta que lleva al baño. Me equivoco. Un grito de horror y miedo deja mis labios cuando me llevo la sorpresa más grande de mi vida.

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¿Qué os parece si cambio la portada?, si queréis me podéis enviar imágenes, ideas, o algo que ayude. Os lo agradecería, no soy muy buena en ello.

¡Gracias por leer!

Claudia.