The dollhouse |h.s| Traducida al Español.

Capítulo 29.

Holly.

Después de haber sido retrasadas por un par de días difíciles, finalmente las chicas, Harry y yo vamos a lo de Niall y Fran. Estoy emocionada, espero que sea divertido, y que Niall y Fran sean cariñosos, aunque lo que he escuchado de Fran no ha sido muy agradable.

Las chicas estamos por todo el dormitorio. Rehacemos nuestro maquillaje muy apegotonado, tratando de elegir uno de docenas de vestidos hermosos de diferentes variedades de colores brillantes. La única chica que no tiene prisa soy yo, porque ya estoy lista. Me quedo con mi mismo maquillaje, no tengo ganas de retocármelo, y tengo el precioso vestido que Harry me compró en Rentalee a mi lado. Todavía queda una hora para salir , así que cuando queden unos minutos me lo pondré, de mientras leo una revista en mi cama con el pijama todavía puesto.

-¿Holly?, ¿No vas a vestirte?, ¿Y tu maquillaje?  - Sarah me pregunta, colocándose sus gigantescos y brillantes pendientes púrpura que coinciden con su largo vestido sedoso que lleva puesto.

-Me lo pondré después - Digo, manteniendo mis ojos en la revista.

-¿Y tu maquillaje?.

-Nah, está bien así - Digo, rodando los ojos.

-¿Qué pasa si el maquillaje no coincide con el vestido?.

-¡Oh, no!, ¡Moriré! - Digo, el sarcasmo colándose en mis palabras.

-Dile a Liz que te maquille, ella hará el mío - Sarah se sienta en mi cama.

-¿Alguien me llama?  - Liz camina hacia nosotras, ya preparada. Lleva un vestido largo rosa pastel que se le detiene en la mitad del muslo.

-Liz, ¿Podrías rehacer a eso que Holly llama maquillaje?.

-Uhm, no me hace falta, así estoy bien  - Digo.

-No protestes. Tú y yo nos vamos al baño - Liz me jala del brazo con fuerza y me arrastra hasta el baño.

-¿De qué color es tu vestido? - Liz me pregunta, mirando todos sus lápices labiales sin fin.

-Uhm, verde y negro.

-Vale, ya se me va haciendo una idea de cómo puedes quedar.

Después de unos cuarenta minutos, ya estoy completamente preparada. Después de maquillarme, Liz me obligó a vestirme. Tengo que admitir, que hizo un trabajo espectacular. Mis pestañas están recubiertas por un grueso rímel negro y mis ojos están trazados por una fina línea de delineador marrón, haciendo que se vean más claros, y mis labios son de un color claro. Me gusta mucho.

Me pongo unos tacones negros de aguja afilados y me reúno con las otras chicas en el dormitorio junto a Liz. Una vez que salgo del cuarto de baño, todas las chicas me miran con la mandíbula por los suelos, mirando mi nueva apariencia, por una vez en mi vida, me siento bien con lo que llevo.

Harry nos llama desde abajo, nombre por nombre, las palabras haciendo eco por las escaleras.

Las chicas y yo bajamos a reunirnos con Harry en la puerta.

Todos caminamos hacia afuera y puedo observar una limusina hummer negra, tan pulida y limpia que parece un espejo.

-¿Una limusina? - Digo, confusa. Se supone que vamos a casa de un amigo de Harry.

-Siempre la trae, es como una tradición - Lola dice, entrando en la limusina. La sigo.

-¿No crees que es exagerado? - Me siento al costado de Lola.

-Para Harry nada es exagerado.

-¿Y Harry? - Por más que mire alrededor, no logro verlo.

-Está sentado delante con Clive.