Sin Amor ©® +18

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Ya me alcanzaron jajaja, pero no me he puesto a escribir... Mmm... Debería darles actualización cada semana y no todos los días como hasta ahora, pero lo pensaré.

Feliz lectura…

Mis dedos juegan en su pecho mientras descansamos después de una ronda matutina, nos despertamos hace un par de horas. El sol se cuela al interior de la habitación haciendo que nos de flojera el levantarnos.

Ninguno de los dos quiere romper este paraíso en el que nos encontramos, su mano recorre libremente mi cintura mientras estoy recostada en su pecho. Anoche fue… increíble. Disfruté cada momento del día, cada caricia. Beso y lo demás.

—¿Está mal que no quiera levantarme?—sonrío antes de negar.

—¿Se siente así?—hace un sonido pensándolo.

—Para nada.

—Esa es tu respuesta.

Besa mi frente antes de suspirar, sonrío antes de incorporarme y darle un beso en los labios. Me lo responde antes de escuchar la puerta ser abierta, ninguno de los dos interrumpe el beso pero una tos nos hace separarnos.

—Tengo entendido que mi habitación es para mi privacidad—un leve gruñido suena.

Menos idiota no puede ser.

—¿Qué quieres James?

Me separó de Darius para acomodarme cómo estaba y dejar mi parte delantera pegada al pecho de mi pareja.

—Hablar con Emily de algo importante—ladeó los labios así como estoy.

—Por el momento tiene cosas que hacer—dice calmado—. Entre ellas hacer varias cosas que no creo que te agraden de ver así qué…

—Es respecto a lo que sucedió entre nuestros padres el día de ayer.

Eso me hace levantar la cabeza y mirar a Darius que me mira antes de suspirar y mirar a James.

—Dame cinco minutos.

—Te veo en el lugar al que íbamos a pasar la tarde.

—Sí.

Darius suspira.

James cierra la puerta y es cuando mi pareja me pone debajo de él. La pregunta está en sus ojos y yo quisiera respondersela con toda la verdad del mundo, pero de verdad quisiera un beso suyo en los labios. Pero quiero una explicación de lo qué pasó ayer entre mi padre y Jared.

—Cuida tu curiosidad.

—Quiero saber que se traen mi padre y Jared.

—¿Quieres qué te acompañe?

—Sí. Pero necesitamos irnos ya.

Asiente antes de levantarse y vestirse, también lo hago. A dónde vamos necesitamos la agilidad del animal pero la apariencia humana. Bajamos siendo consientes de varias miradas, las ignoró y sigo caminando con mi pareja dándome mimos de vez en cuando.

Darius y yo salimos por la puerta principal de la mansión y lo llevo por el pueblo hasta llegar a la salida, es donde camino en dirección al bosque. Empiezo a correr con Darius a mi lado, ambos saltamos lo que hay enfrente. Conozco esté camino a la perfección, tanto cómo a mi cuerpo. En pocos segundos somos alcanzados por Valquiria y Kenneth, mierda. No digo nada, sólo sigo corriendo y perdiéndome en lo más hondo del bosque. Cuando finalmente llegó a dónde quiero, James está recargado en el trono que tumbe hace muchos años.

—¿No puedes dejarla sola cinco minutos?

—No contigo.

Rueda los ojos antes de negar con la cabeza. Valquiria toma una rama para convertirla en una silla o algo así, se sienta con Kenneth a su lado mientras Darius y yo nos quedamos de pie y James recargado en el árbol.