¡𝑳𝒂 𝑶𝒅𝒊𝒐! - 𝑪𝒉𝒂𝒆𝒏𝒏𝒊𝒆

Capítulo 5

POV Jennie

Tuve un sueño muy extraño así que me desperté mucho antes de que sonara mi alarma, ya no tenía sueño así que me levante de la cama y fui al baño para bañarme, ya que me bañe, me cambie, me maquille un poco y fui a la cocina para prepararme mi desayuno, lo primero que se me ocurrió fue cereal con leche así que me serví y empecé a comer, vi mi celular y me sorprendió la hora ya que todavía era muy temprano. Tae todavía estaba dormido y no quería despertarlo, quería irme a la escuela más pronto por una vez en la vida y serviría de que haría alguna tarea que me falto, así que decidí dejarle una nota en su habitación e irme a la escuela en autobús.

Cuando llegue a la escuela me dirigí al salón y me encontré con nada más y nada menos que con la estúpida de Rosé, solo estaba ella, se supone que era ya como mi "amiga" así que trate de dar mi mejor cara y saludarla.

—Hola —dije con una sonrisa forzosa.

—Hola —me sonrió.

—¿Por qué llegaste tan temprano? —pregunté.

—Pregunto lo mismo —sonrío.

Debo de admitir que su sonrisa era preciosa.

—Pero yo te pregunté primero —dije.

—Bueno, es que se me olvidaron cuadernos en el locker y en esos cuadernos era donde tenía que hacer la tarea ¿Tú? —dijo Rosé

—Tuve una pesadilla y me levante temprano, por cierto no he hecho la tarea — fui a un asiento retirado a donde estaba Rosé, y antes de que me sentara Rosé me interrumpió...

—¿Te vas a sentar hasta allá? —preguntó.

—Mmm ¿Si por qué?

—¿Por qué no te sientas a lado de mi?

—Es que... No... quiero problemas —en verdad no quería sentarme a lado de ella.

—¿Problemas de qué?

—No sé... Como nos pasó ayer.

—Ven y te paso la tarea —me sonrío ¿Qué rayos pretendía?.

—No necesito que me la pases gracias —le mostré media sonrisa y me senté en el asiento lejano a ella.

—Está bien —ella tomó sus cosas y se dirigió hacia conmigo, hasta que se sentó a lado de mí, ¿Esto es enserio? Ella solo se acomodó y después me miró para sonreírme.

—¡Deja de hacerlo! —dije enfadada.

—¿Qué cosa? —dijo Rosé.

—Sonreírme.

Ella solo me sonrío de nuevo.

POV Rosé

Quería incomodar a Jennie, era divertido ver como se enojaba, además sé que ella me seguía odiando, lo cual hacia más divertido molestarla.

—¿Por qué no te puedo sonreír? —le dije a Jennie sonriéndole.

—Porque me incomoda —volteó la cara hacia otro lado.

—Está bien —volví la vista a mis cuadernos que estaban en mi butaca, solo sentía la mirada de Jennie sobre mí.

—Rosé —me habló Jennie.

—¿Sí? -respondí.

—¿Con quién te juntas en los recesos?.

—Con nadie ¿Por qué?.

—¿Por qué no te juntas conmigo y mis amigas?.

¿Jennie quería que me juntara con ella? Tal vez trama algo, sé que ella me odia por alguna razón aunque lo niegue y no me pediría que estuviera con ella en los descansos a menos que tenga algo en mente contra mí.

—Ehh... Esteee... Creo que no voy a poder —le respondí, y en verdad también no podía porque tenía entrenamiento.

—¿Por qué no?

Empezaron a llegar compañeros al salón y después entró el maestro, por lo cual no le respondí a Jennie.

Después de que pasaran varias horas sonó el timbre del receso y salí corriendo para que Jennie ya no preguntara nada, la verdad es que no quería juntarme con ella y tampoco quería darle explicaciones de que estoy en un equipo de básquetbol.

Llegué con el entrenador y me dio un uniforme, después me indicó que me cambiara de ropa en las duchas donde también había vestidores, y así fue, cuando me cambié, regresé con el entrenador y me dijo que empezara a calentar mientras llegaban más chicas del nuevo equipo, ya que sólo habían llegado tres incluyéndome.

Enfrente de nosotros estaba el equipo de basquetbol varonil entrenando.

POV Jennie

—¿Entonces piensas terminarlo? —dice Irene, una de mis amigas.

Me encontraba sentada en una mesa de la cafetería de la escuela con mis amigas Irene y Seulgi, les estaba contando que estaba pensando en terminar con mi novio Kai.

—Si, pienso terminarlo, pero no se todavía bien, es que a veces pierde el encanto —dije.

—¿Cuándo termines con el puedo dármelo? —dijo Seulgi muy coquetamente.

La mire con cara de pocos amigos.

—¡Es broma Jen! —dijo Seulgi riéndose— Pero es que está buenísimo, no entiendo porque lo quieres terminar si es tan lindo.

—No sé... Es que ya no me gusta como antes, es aburrido estar con él, aparte de que siempre es él y él y él y solo él, le tengo afecto pero nada más.

—Creo que deberías pensarlo más tiempo, no queremos que hagas algo que después te haga arrepentirte —dijo Irene.

—Tal vez tengan razón, así que... —vi el reloj que estaba en mi muñeca— Ahora mismo creo que está entrenando en las canchas de básquet, así que iré, tal vez si lo veo de nuevo me vuelva el encanto hacia él —sonreí coquetamente y me dirigí a las canchas.