Never Again

Desconfianza

Al ingresar a la cabaña tuvo un pequeño escalofrío que recorrió toda su espalda, todo estaba tal y como había visto en sus visiones, la mesa de la cocina con esa horrible comida podrida y la tetera encendida, prueba de que el cazador andaba cerca, sin prisa Mono cruzo la puerta y la pudo oír....

Esa suave y tranquila melodía, sea donde sea la podría reconocer sin ningún problema, era la cajita musical de Six. Al bajar al sótano la pudo escuchar con mejor claridad, la melodía era bastante tranquila y transmitía una sensación de paz, pero para Mono no era así...
La melodía solo le recordaba a la visión dónde pudo ver a Six transformada en un monstruo mientras cuidaba su preciada caja de música y hacia lo imposible para tratar a matar a Mono por tratar de romperla. Rápidamente sacudió su cabeza y no trato de pensar mucho en ello, lentamente se acercó a la puerta y ahí la pudo ver, sentada mientras daba cuerda a la caja musical sin siquiera notar su presencia, ella estaba en su mundo, atraída e hipnotizada por la suave melodía, el pequeño se quedó viéndola por un rato largo a través de las pequeñas grietas de la puerta.

- Ahhh Six...- susurro con algo de tristeza y rencor en su voz, dió un par de pasos hacia atrás y fue al cuarto donde se encontraba el hacha que uso para liberarla, dió un pequeño salto y pudo conseguirla. Lento pero sin prisa Mono se encontraba frente a la puerta mirándola fijamente.

-Deberia dejarte ahí encerrada y largarme de aquí...- en su voz de podía notar bastante irá, la mente de Mono reproducía esa imagen inconscientemente una y otra vez, la mirada fría y sin vida de Six mientras le soltaba la mano, todo el odio que Mono jamás tuvo se estaba manifestando en esos momentos.

- Fui un tonto en haber confiado en ti, te salve incontables veces, te ayude, te ofrecí mi mano y tú la alejaste...- con cada palabra que salía de su boca, las lágrimas empezaron a caer lentamente, mientras que sostenía con más y más fuerza su hacha. Todas las emociones negativas habían salido a flote, tenía que desahogarse de una forma u otra, no podía cargar con ese odio el sólo.

De mala gana Mono soltó su hacha y se dió vuelta tratando de tranquilizarse poco a poco, debería mantenerse frío y sereno, no ganaría nada dejándose consumir por el odio.
Las opciones eran claras para el, el abandonar a Six y dejarla significaba que evitaría todo el desenlace trágico que le sucedería, pero también su viaje se haría más complicado, aunque no le gustará para nada admitirlo sin Six las cosas no serían nada fáciles. Pero el liberarla de nuevo significaría correr el riesgo de que todo lo que su sombra le mostró vuelva a suceder, terminando de nuevo en esa silla convirtiéndose en su peor pesadilla.
Debería planificar bien las cosas para poder seguir con su camino y evitar su destino, estaba tan inmerso en sus pensamientos que nada a su alrededor le importaba hasta que algo lo saco de su trance.

-Hey....

Mono se quedó helado, reconocía esa voz a la perfección, lentamente se dió vuelta y ahí estaba ella, observandolo fijamente por los huecos de la vieja puerta de madera.

-Podrias ayudarme a salir por favor?- Six estaba pidiendo ayuda a mono, pero este estaba estático en su lugar sin mover un simple músculo.
Esto lo había confundido bastante, en su visión esto no había pasado... La forma en que debería haber pasado es que el entraba sin previo aviso a liberarla, pero asustandola haciendo que ella se esconda de el. Sin quererlo Mono había cambiado los acontecimientos del futuro, pero todavía tenía ese conflicto interno si liberarla o no, podría ser de ayuda pero a la vez un gran peligro para el.

-Oye te estoy hablando... Me escuchas??

Tu me estas pidiendo ayuda??

A mí??

Mentirosa...

Sé que de lo eres capaz, ya lo he visto...

Debería dejarte aquí a morir por lo que me has hecho...