『𝐌𝐀𝐘𝐁𝐄 𝐍𝐎𝐓𝐇𝐈𝐍𝐆 𝐋𝐀𝐒𝐓 𝐅𝐎𝐑𝐄𝐕𝐄𝐑』
Las promesas que el le había Hecho a Catalina se esfumaron, de un segundo a otro el se vio en la tarea de marchar para no hacerle daño a su amada, por algo verdaderamente insignificante.
La llegad...
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Catalina comienza a removerse incómoda en su cama, teniendo de pesadilla, el momento en el que escucha los gritos de todos los turistas, al momento de entrar a la sala de tronos.
-¡Basta....basta!- pide la castaña, sumergida en su pesadilla.
>¡No!
La chica siente como la empiezan a mover ligeramente por lo cual se despierta y sostiene una mano, levanta la vista confundida, y mira a Edward el cual la mira preocupado.
-Estas aqui- susurra la castaña.
-Duerme, pequeña- pide el cobrizo.
La chica lo mira unos segundos quedándose completamente callada.
-Estare aquí cuando despiertes- susurra Edward.
>La única razón por la que me fui, es porque crei que te estaba protegiendo, quería que tuvieras la oportunidad de una vida normal y tranquila.
Habla el chico mientras acaricia lentamente la mejilla de Cata.
-Fue tan fácil para ti irte- dice la chica mientras baja la mirada.
Edward niega rápidamente mientras mira a la chica.
-Dejarte fue lo más doloroso que he hecho en cien años- Catalina mira al Vampiro con tristeza.
>Y te juro que jamás te volveré a fallar, lo siento mucho.
Catalina se sienta en su cama y se acerca a Edward para juntar sus frentes.
-Llego Charlie- anuncia Edward mientras siente como este está atrás de la puerta.
-Hola- susurra el jefe de policía.
Catalina mira a donde se encontraba Edward sentado, pero al no ver que esta allí dirige su mirada a su padre.
-Hola papá- susurra la chica.
-¿Como te sientes- pregunta apoyándose en el marco de la puerta.
-Estoy bien papá, no tienes que preocuparte- habla la chica.
-La última vez que dijiste eso te fuiste y no te vi por tres dias- admite el Swan.
-Papá yo deberás lo siento, lo que dije esa vez no era verdad- dice la chica refiriéndose a la vez en que se fue por lo del cazador.
