Seamos profesionales [Gavin X RK900] "Editando"

[2] Estúpida máquina

14 de junio del 2039
Departamento de policía de Detroit
7:45 AM
Gavin

El detective Reed tenía la cabeza metida entre las piernas del androide, su cara estaba tan sonrojada por la vergüenza que no sabía que decir o hacer, pero ¿Cómo terminaron en esa situación?, ¿Que paso a esa hora de la mañana?

El androide unas horas atrás había llegado de imprevisto a la puerta del departamento del moreno quien estaba levantándose, al abrir la cerradura y girar el picaporte no pensó en ver al mayor en frente de él, su cara de sorpresa no daba para más hasta que regreso a la tierra unos segundos después dejando todo el sueño y la flojera de lado.

—¿Por qué mierda estás aquí a estás hora?—pregunto muy molesto, casi matando al contrario con aquellas palabras.

—Tenemos un caso detective—se quejo el androide por el tono arisco de su compañero.

—No voy a ir a ningún lugar contigo pedazo de hojalata—dijo para cerrar la puerta y así librarse de aquello.

Gavin sintió un fuerte jalón que lo hizo tropezar hacia adelante cosa que lo llevo a quedar justo delante del pecho del contrario quien de forma retadora lo miraba desde arriba como poca cosa, sin más que decir aquel acto lo tomo como que estaba listo para salir a trabajar, así que con pijama y todo lo saco a la fuerza del departamento con el menor gritando maldiciones y tratando de volver a entrar.

El moreno de un solo movimiento con sus piernas hizo trastabillar al más alto, así logró ponerse en una posición más cómoda, dónde termino pegando una patada en el brazo al androide, este al librarse por un segundo del agarre del más alto, ya que este mostró cierta sorpresa en su expresión gélida, salió corriendo puertas adentro del departamento pero rápidamente el más bajo fue detenido a mitad de su accionar, se batuqueo como un niño hasta que su camisa se desgarro por el agarre del mayor, al mirarse en aquellas fachas se giró molesto tratando de pegarle un puñetazo en la cara a su compañero quien lo esquivo sin mucha dificultad.

La pelea comenzó entre los dos, se adentraron en el apartamento donde esquivando puños y rompiendo cosas lograron espantar a una pequeña criaturita que los acompañaba, el moreno estaba arrechisimo por qué no podía atinarle bien los golpes, al intentar dar en un punto bajo del contrario este lo agarro con mucha fuerza torciendo de forma suave el brazo del humano y enredando sus piernas en la cabeza de igual forma, quedando así el androide con el brazo del detective a lo largo de su pecho y parte de la cara del detective entre las pantorrillas ajenas, era una pose perfecta de derribe que es de muy usada en judo.

—Suéltame maldita máquina—sentencio con cierto tono dificultoso.

Gavin se removió sintiendo como el agarre del contrario de volvía más fuerte haciéndole molestar incluso más de lo que ya estaba, trato de sacarse pero la maldita hojalata tenía demasiada fuerza, así que se dio por vencido, al ver así su pequeño gatito asustado debajo de la mesa mirándolos con miedo, sus patitas mentidas hacia adentro enrollando su pequeña colita alrededor de su cuerpo y mirándolo como si fuera un monstruo, eso le partió el corazón.

—Ya, está bien-soltó sin aire—por favor suéltame.

El androide le soltó, lo miro serio para poder decir algo sobre esa mala actitud pero prefirió callar, prefirió quedarse observando a su compañero, hacia unos segundos hizo un informe de queja describiendo al detective como un imbécil en pocas palabras, vio como el moreno se acercaba a la mesa y se agachaba para buscar algo debajo de ella, al incorporarse noto que tenía una criatura entre sus brazos que estaba temblando, el moreno le acarició el pelaje tratando de calmar al pobre mínimo.

—Joder, eso duele, no me claves tus garras gato—se quejo el detective quejándose—Quédate sentado allí pedazo de mierda, mira lo que hiciste.

Al terminar de decir aquello el androide se quedó mirando al mínimo que se acurrucó en el brazo de Gavin que lo sostenía con cuidado, luego de unos minutos camino hasta el mueble dónde lo acostó sobre un cojín ya más tranquilo y este pequeño felino se le quedó mirando al mayor con curiosidad, luego el detective se fue caminando hasta su habitación maldiciendo por lo bajo. El moreno se contendría por su gato, siempre y cuándo el pequeño esté protegido el arriesgaría la vida por su pequeña mascota.