How to be a King » Muke

XXVIII.

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— Oh hermanito...— Uno de los guardias le acercó un pañuelo blanco y Claudius limpió los restos de sangre de este mientras observaba como yacía el cuerpo sin vida de su hermano frente a él, en el suelo. — Te preocupaste tanto por la seguridad de Luke, Ashton y por la de tu esposa... que descuidaste la tuya. — Se acercó a los todavía abiertos ojos de Malcom, los cerró con delicadeza y con una sonrisa cínica en el rostro. — Fuiste un buen hermano... hiciste lo que pudiste, pero aun así no me viste venir... no viste como hice que todas las direcciones apuntaran a ti, hasta hice que tu hijo se ponga en tu contra. — Sonrió ampliamente, los guardias a su alrededor simplemente observaban la conversación que tenía el hombre con el cadáver de su hermano, evitando pisar el charco de sangre que había alrededor su cuerpo, lo había tomado por sorpresa y lo había apuñalado justo en el mismo lugar que a Luke lo habían apuñalado, solo que con mucha más fuerza... y Malcom no tenía a nadie para salvarlo.

Malcom Hemmings era inocente, jamás fue uno de los enemigos de la corona, pero su hermano se encargó de hacerle pensar a su familia que sí. Malcom no se había dado cuenta de esto hasta en el momento en el que su hijo lo acusó de tal cosa, allí fue cuando se dio cuenta de que su enemigo se encontraba más cerca de lo que él pensaba.

Malcom Hemmings falleció mirando a los ojos a su hermano, al por el cual hubiera dado la vida, dándose cuenta de que Claudius también era el responsable por la muerte de su hermano mayor, el responsable del dolor de su familia.

En los ojos azules que se parecían tanto a los suyos, no vio sentimiento alguno, ni una pizca del hermano menor con el que pasaban horas jugando por las tardes, al que consolaba cada vez que se caía y se raspaba la rodilla, al que ayudaba hasta altas horas de la noche con su tarea de matemáticas. Malcom murió viendo a alguien que él no reconocía como su hermano, él murió solo, lejos de su hijo, de su esposa, y de aquél amor imposible que se encontraba en la misma casa que él, que dormía plácidamente, sin tener idea de que mientras ella soñaba, Malcom moría en completa soledad.

— Armen la escena muchachos... iré a despertar a nuestras huéspedes e informarles lo sucedido. — Dijo Claudius mientras le entregaba el arma homicida a uno de los guardias y este la guardaba en un maletín.

Soundtrack: Two Of Us- Louis Tomlinson

Unos golpes fuertes contra la puerta de la habitación despertaron a Michael, quien se removió entre las sabanas, encontrándose con un peso sobre él, el príncipe se encontraba durmiendo en su pecho.

Con mucho cuidado se alejó, dejando la cabeza de un durmiente Luke sobre una almohada. Empezó a mover todos los muebles que había puesto para mover la puerta, y los golpes no paraban, abrió la puerta y se encontró con Calum detrás de esta, con los ojos llorosos.

— ¿Qué pasó? — Preguntó Michael algo aturdido, Calum no llegó a responderle que Clifford vio a Ashton, su mejor amigo desplomándose en el piso llorando desconsoladamente. Sin pensarlo ni dos segundos se acercó a él. — ¿Ash, que tienes? ¿Qué pasa? — El príncipe llevó su mirada ojimiel rota hacia su mejor amigo.

— Papá...— Soltó antes de comenzar a llorar desconsoladamente otra vez, una lagrima cayó por la mejilla de Michael cuando entendió a lo que Ashton se refería. — No sé quién fue...— Dijo mientras su pecho subía y bajaba con violencia, respirando agitadamente mientras las lágrimas no paraban de correr por sus mejillas. — Pero voy a encontrarlo Michael, y voy a matarlo. — Clifford envolvió a su mejor amigo entre sus brazos, mientras este lloraba a más no poder.