How to be a King » Muke

XXX (Parte I)

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Dos días habían pasado desde el momento en el que Luke perdió toda esperanza, desde que perdió a Michael.

Hacía dos días lo tenían prisionero en una de las celdas más protegidas de todos los calabozos, hacia dos días no veía la luz solar ni respiraba aire puro. Las únicas personas que había visto durante su cautiverio eran un par de guardias que le traían comida y agua, ni siquiera se atrevía a probar bocado por miedo a que esta contuviera algo, al igual que el agua, pero llegó un momento en el que su cuerpo comenzó a pedirla, pero por el momento seguía vivo así que seguramente el líquido no tenía nada.

Tenía unas ojeras oscuras y pronunciadas, no podía pegar un ojo en paz en el duro y frio suelo de su celda, siempre se despertaba luego de soñar con el disparo y la imagen que se repetía en bucle en su cabeza de Michael cayendo en el piso muerto, aunque no la haya visto, en sus sueños era su peor pesadilla.

Desde que estaba allí Claudius no había venido a verlo, es más, dentro de unas pocas horas lo coronarían como el nuevo rey de Idealem. La versión oficial era que a pesar de que la policía había rastrillado todo el país, no habían encontrado rastro alguno de Michael Clifford o del príncipe, así que la prensa incentivada por los enemigos de la corona comenzó a correr el rumor de que Luke se había escapado con su guardaespaldas a otro país, basados en las fotografías que tantos problemas habían generado semanas atrás.

Luego de una abdicación por parte de Ashton, quien apenas abandonaba su habitación para comer, el parlamento accedió a coronar como rey a Claudius, teniendo la mayoría de votos a favor gracias a que el 75% del parlamento estaba conformado por enemigos de la corona, los parlamentarios más jóvenes pertenecientes al 25% restante quisieron oponerse pero no tuvieron éxito alguno, ellos creían que había que posponer la coronación hasta que encontraran al príncipe, tal y como la ley decía, pero los enemigos de la corona les ganaron esa batalla.

Luke simplemente se limitaba a existir, había intentado todo para salir de allí, y estuvo cerca en las primeras oportunidades, luego de haber golpeado al guardia que le traía la comida, pero una manada de guardias que se encontraban en la puerta lo metieron de nuevo dentro de la celda sin contenerse a la hora de golpearlo.

Soltó un suspiro mientras veía como una pequeña rejilla en la puerta se abría, revelando los ojos de Stonem, quien lo observó con tristeza y luego abrió la puerta, traía una bandeja y un pequeño botiquín.

Cerró la puerta detrás de sí y se acercó al príncipe, quien automáticamente comenzó a arrastrarse hacia atrás con las pocas fuerzas que le quedaban. La última vez que había visto a Alexander este le estaba apuntando a Michael con un arma, y sabía en qué había terminado aquello.

— Tienes que comer. — Soltó mientras acercaba la bandeja al príncipe, este la observó con rechazo y negó con la cabeza. Su estómago rugía por el hambre, pero si Claudius quería matarlo, quería que lo hiciera de frente, mirándolo a los ojos.

Aunque de todas formas estaba seguro de que si Claudius lo quisiera muerto ya lo estaría, por eso no entendía porque decidía retenerlo allí.

— La comida no tiene nada Luke... necesitas tus fuerzas. — Soltó Stonem arrodillándose junto al príncipe, mientras abría el botiquín. — Si no vas a comer al menos déjame curar tus heridas antes de que mueras de una infección. —

— ¿No es eso lo que está esperando Claudius? — Preguntó entre dientes, realmente tenía ganas de saltar sobre el hombre y golpearlo hasta morir, matarlo con sus propias manos.