-Capitulo veintiuno-

1.9K 98 2
                                    

A la mañana siguiente, despierto y miro a mi lado, Jaden totalmente dormido, se ve tan, pero tan tierno que me lo quiero comer a besos.

Me le quedo viendo embobada, con mi dedo acarició su cara, su mejilla, su nariz, sus cejas, su cuello, sus labios... dejo un pequeño y delicado beso y lo veo, esperando a que despierte, pero como no es así dejo otro pequeño beso en su mejilla, en su cuello y hombro, río un poco al ver que no despierta, dejo otro pequeño beso en sus labios, otro, otro, otro y es entonces cuando Jaden atrapa mis labios, sostiene mi cintura y me sube arriba de él, yo grito un poco por el susto, tomo la cara de mi novio entre mis manos y lo beso, el poco a poco va bajando las manos de mi cintura hasta llegar a mi trasero, río en el beso y levanto sus manos, el gruñe un poco y me pega más a él por mi cintura.

Poco a poco me voy separando, y lo miro, sigue con sus ojos cerrados y con lagañas.

—Buenos días—dejo un beso en la punta de su nariz.

—Buenos días—dice con voz ronca, mientras se quita sus lagañas y me mira, para luego sonreír y acariciar mi mejilla—Te ves hermosa recién levantada, ¡quiero despertar contigo siempre!

Yo rio—Quizás yo también quiera despertar contigo todas las mañanas.

—Casémonos—hace que suelte la carcajada.

—Llevamos un día de novios Jaden—sonrío tierna.

—Al menos somos novios, conozco a gente que se casa sin ser novios—asiente convencido.

—Vamos a desayunar—le di pequeñas palmadas en su pecho.

—Dale—comenzó a besar mi cuello, reí y lo empujé.

—Comida Jaden, comida—me separe de él.

Me levante y me estire para después bajar juntos.

—Buenos días—dije llegando a la cocina donde estaba Amy y Sophie.

—Buenos días—dijeron al mismo tiempo.

—¿Te sirvo el desayuno?—pregunta Amy.

—Si por favor—asentí.

Jaden terminó de bajar y se sentó a mi lado, como saludo solo hizo la seña de amor y paz, Amy le pregunto lo mismo que a mi y él asintió.

...

Vamos llegando a mi casa, tengo puesto otra vez mi vestido, aunque también me traje la ropa de Jaden para usarla como pijama.

Jaden aparca en la acera y se baja, para después abrí mi puerta y yo bajarme, le agradezco con un beso en sus labios y caminamos a la entrada principal, la abro y pasó, me giro a ver a Jaden.

—Mañana o más tarde vengo, depende cuando te extrañe—dijo Jaden.

—No tardarás tanto en venir a mi—paso mi brazos por su cuello.

—¿Quieres ver cuánto puedo vivir sin ti?—pasa sus brazos por mi cintura.

—Veamos—sonrío y dejo un beso en sus labios.

—Pues veamos—dice siguiendo mis besos.

Me separo y le sonrío para entrar a casa después de despedirme, espero que se suba a su carro y se despida agitando la mano antes de acelerar.

Cierro la puerta detrás de mi y camino a mi cuarto, una vez en el tomo algo de ropa para estar en casa y me quito el vestido junto con los tacones.

Me pongo un short de algodón negro y de blusa me pongo una igual de algodón color morada, dejo mis tacones en su lugar, el vestido lo dejé en la canasta de ropa sucia.

𝙇𝘼 𝘿𝙄𝙎𝙏𝘼𝙉𝘾𝙄𝘼       𝐽-𝐻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora